Imagen que presentaba en la tarde de ayer el césped del estadio de los Juegos del Mediterráneo, escenario del encuentro de hoy. Foto: MIQUEL ALZAMORA

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Mallorca y Almería se han olvidado de cielo para mirar sólo al césped. Las lluvias torrenciales caídas estas últimas horas dejaron las instalaciones del estadio Juegos Mediterráneos inundadas, lo que obligó a los empleados del club a trabajar a destajo durante toda la jornada de ayer para intentar achicar el agua del césped y también de las instalaciones interiores, hasta donde se había filtrado. Durante el día de ayer, el Instituto Nacional de Meteorología activó la alerta naranja por las lluvias caídas y en previsión de que éstas durante las próximas horas alcanzasen los 40 litros por metro cuadrado en una hora y de 90 litros en 12 horas. No obstante, ayer lució el sol y no peligra el Almería-Mallorca de hoy (17:00 horas, estadio Juegos Mediterráneos) un duelo inédito en la máxima categoría del fútbol español. El equipo andaluz -refundado en 2001 tras las fusiones del Polideportivo Almería y el Almería CF- encadena 26 años sin pisar suelo de Primera y las estadísticas brillan por su ausencia. Los últimos registros apuntan a Segunda. Cuatro enfrentamientos en total con un victoria para el Mallorca, dos para el rival y un empate. Son números de la década de los noventa, totalmente válidos para la estadística pero inútiles desde el punto de vista práctico.

Ambos conjuntos afrontan el choque relativamente igualados en la clasificación, aunque este aspecto no deja de ser anecdótico en pleno nacimiento de la Liga. Cuatro puntos del Mallorca por tres del Almería. El grupo andaluz abrió la Liga ganando en Riazor (0-3), cayó en su casa frente al Valencia (1-2) y cedió también la pasada jornada en el Bernabéu (3-1). Los de Manzano arrancaron con solvencia tras ganar en casa al Levante y sacar un empate del Calderón, pero cedieron frente al Villarreal. Situados los números y comprobada la semejanza entre ambos equipos, en lo que sí andan extremadamente parejos es en las injusticias arbitrales.

Los dos sufrieron errores en contra de enorme consideración hace siete días. El combinado de Unai Emery vio cómo el colegiado anulaba un tanto a su equipo en Chamartín por supuesto fuera de juego de Uche. Higuaín rompía claramente la posición antirreglamentaria, pero ni el asistente ni tampoco el colegiado Àlvarez Izquierdo vieron esta incidencia. El gol no subió al marcador. En caso de haberlo hecho hubiera supuesto el empate a uno.

En Palma sucedió lo mismo. Güiza marcó a pase de Gonzalo Castro un espléndido tanto de cabeza, pero el asistente y el árbitro Pérez Burrull interpretaron (¿?) fuera de juego. Al final derrota en Son Moix.

Por lo tanto hoy el colegiado Lizondo Cortés estará en el punto de mira tanto de andaluces como de baleares. Es irremediable, siempre sucede cuando la resaca de la anterior jornada deja un poso de rabia e impotencia tras una actuación arbitral discutida.