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Iñaki Dufour|MADRID
El Atlético de Madrid repitió sus virtudes, un enorme potencial goleador, y defectos, su debilidad defensiva, frente al Villarreal, que aprovechó los errores atrás del equipo rojiblanco para remontar el marcador en dos ocasiones, primero un 2-0 y luego un 3-2, y conseguir un sufrido e importante triunfo.

De nada le sirvió al Atlético un ataque casi infalible ni sus dos goles antes de la primera media hora frente al equipo castellonense, porque perdió su primer encuentro como local de toda la temporada y dio un paso atrás en sus altas aspiraciones del presente curso.

El Atlético contó con el argentino 'Kun' Agüero y Pablo Ibáñez, algo tocados por sendas contracturas, para enfrentarse al Villarreal, en un duelo con ambos en puestos de Liga de Campeones y con una oportunidad inmejorable para reducir su distancias respecto al liderato de la clasificación, en poder del Real Madrid.

La recuperación del central fue una satisfacción para el mexicano Javier Aguirre en el inicio del choque, porque, entre la ausencia de un dominio claro en el arranque del encuentro, firmó un inesperado 1-0 a los nueve minutos, tras cabecear a la escuadra un buen centro de Pernía. En este Atlético marcan hasta los defensas. No perdió la cara al partido el Villarreal, un equipo siempre valiente en sus visitas. El bloque castellonense presentó su habitual toque en el centro del campo desde los primeros instantes, pero le faltó profundidad en el cuarto de hora inicial ante la colocación y el repliegue rojiblanco en sus acciones defensivas.

El equipo visitante, que tuvo que ir a remolque en el marcador durante casi todo el partido, dinamitó el choque al final, tras un pase perfecto de Cani al turco Nihat, que sentenció la cita a favor del bando amarillo con el definitivo 3-4. Era la primera derrota en casa del equipo rojiblanco esta temporada, en un bonito encuentro, en el que los locales pagaron sus errores defensivos.