El proyecto único se tambalea

Fernando Fernández El futuro proyecto de unificación entre Palma y Bàsquet Inca está más en el aire que nunca. El todavía embrionario Bàsquet Mallorca, iniciativa amparada por el Govern y que reclamaba el apoyo de instituciones como el Consell de Mallorca y los ayuntamientos de la capital balear y la de es Raiguer, pasa por un cambio notable en las posturas de las partes implicadas, que en la próxima semana volverán a sentarse para tratar el estado de una cuestión que ha estado aparcada durante varias semanas, dando un papel protagonista a las complejas situaciones deportivas de los dos conjuntos mallorquines inmersos en la LEB Oro. Si en los próximos días deben mantener una nueva reunión los presidentes de Palma e Inca, Guillem Alomar y Joan Llompart, con el director general de Esports, Gabriel Gili, el dirigente de la escuadra de Ciutat ya ha mostrado su disconformidad con la propuesta formulada por sus todavía rivales en la pista. «Las distancias son muy grandes, y si no cambian las cosas, el Palma se planteará seguir adelante en solitario», aseveró el presidente de la entidad inquilina del Palma Arena, quien explicó que «hay condiciones que no son asumibles», además de remitir al encuentro que en cuestión de días deben mantener el propio Alomar, el presidente del Bàsquet Inca, Joan Llompart, y el director general d'Esports del Govern, Gabriel Gili. De hecho, la Conselleria d'Esports i Joventut ha sido la gran impulsora de una medida que en su día fue definida por su titular, Mateu Cañellas, como «un proyecto de supervivencia».