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Efe |BARCELONA
Frank Rijkaard, que dirigirá hoy ante el Mallorca su último partido como entrenador del Barca en el Camp Nou, se despidió sin rencor. A pesar de que el presidente Joan Laporta lo señaló como único responsable de la situación deportiva, el holandés no quiso entrar en polémicas y dijo que había sido «un gran honor» para él, haber dirigido el Barça durante cinco temporadas.

Quienes esperaban que Rijkaard pronunciara una palabra más alta que otra, se equivocaron. El técnico mantuvo en todo momento la calma desde el primer momento en una multitudinaria conferencia de prensa.

Quitando trascendencia a lo ocurrido, Rijkaard admite que se va del Barca por «los mecanismos del fútbol», por la lógica aplastante de este deporte. En todo momento, el holandés asumió su responsabilidad en el éxito y en el fracaso y admitió que se sentía «algo nervioso» ante su despedida del Camp Nou. «Nunca me ha gustado demasiado centrar la atención», insistió Rijkaard, que vestía un polo de color azul con un corazón en el pecho y la leyenda «Amor», toda una declaración de intenciones para lo que expresó después ante los periodistas.

No tuvo ni un sólo reproche para sus jugadores ni tampoco para la junta directiva de Laporta. Asegura que no le han dolido las formas en su despedida -la prensa publicó antes de que él lo supiera su adiós del club y la llegada de Josep Guardiola-, y recalcó que lo que realmente le importa son «las cosas bonitas» que ha vivido.

Cuando se le preguntó por las declaraciones de Laporta, en las que veladamente culpó a Rijkaard de los resultados negativos cosechados en los últimos dos años, y si no era más justo repartir las culpas, Rijkaard ha afirmado que personalmente no es de los que culpa a nadie. «Asumo mi responsabilidad y eso es una cosa natural. Se habla mucho del presidente, pero él no puede marcar goles. El área deportiva fue dirigida por mí y si los resultados no son los que queremos, qué tiene que ver el presidente con esto», se pregunta.

El holandés, quien ha informado de que Laporta le comunicó la decisión de que no continuaba el jueves, tras el partido en el Bernabeu, también tuvo palabras de agradecimiento para sus jugadores.

«Cada uno ha hecho de todo, dadas las circunstancias. Sinceramente cada uno siempre ha querido lo mejor para el club, para sí mismo y sus compañeros», añadió.

Ha insistido que en que todo lo que ha hecho en los dos últimos años ha sido para poder mejorar las cosas. «Hemos trabajado mucho con el corazón y con honestidad. La gente que he conocido aquí nunca la podré olvidar. Quiero agradecer los momentos vividos, no sólo los éxitos, sino todos», ha indicado.