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T.J./Efe|HAMBURGO
Tras el cisma entre los jugadores y el presidente de la Federación Española por la elección de Madrid como sede de las semifinales de la Copa Davis, Rafael Nadal y Carlos Moyà vuelven esta semana a las pistas tras su prematura eliminación en el Masters Series de Roma. La cita con las mejores raquetas del mundo es en Hamburgo, donde Roger Federer defenderá la corona conquistada la pasada temporada. Nadal quiere reivindicar su hegemonía sobre tierra batida sobre la arcilla menos propicia para su juego, mientras que Moyà intentará romper la racha que le ha llevado a despedirse a las primeras de cambio en sus tres últimos torneos.

El número dos del mundo, que cayó a manos de Juan Carlos Ferrero en su primer partido en el Foro Italico en 2008, ha quedado exento de la primera ronda y aguarda rival del enfrentamiento entre el italiano Potito Starace y un jugador llegado de la fase previa. Sin embargo, todo apunta que el primer rival de entidad para el tricampeón de Roland Garros será en los octavos de final el escocés Andy Murray, que inicia su andadura en Hamburgo frente al ruso Dimitry Tursunov.

También se mantiene a la expectativa Carlos Moyà, que disputará su primer partido ante otro jugador procedente de la fase previa. El palmesano podría verse las caras con Rafael Nadal, pero antes tendría que acabar con Berdych, que es junto a Blake y, sobre todo, Novak Djokovic las principales amenazas del manacorí por su parte del cuadro.

Roger Federer defiende la victoria lograda ante el tricampeón de Roland Garros en la pasada final. El suizo dejó escapar la oportunidad en Roma y quiere asestar un duro golpe moral a su principal perseguidor antes de buscar la Copa de los Mosqueteros que le permitiría completar su palmarés con el único grande que aún no adorna sus repletas vitrinas. Los principales rivales en su carrera hacia la esperada final con Rafael Nadal serán David Ferrer, que se presume como su adversario en los cuartos de final, y Nikolay Davydenko, que podría ser el rival del helvético en unas hipotéticas semifinales.

Los registros del mallorquín sobre arcilla en las últimas tres temporadas le colocan como principal favorito. Después de haber logrado los títulos en el Masters Series de Montecarlo y la victoria en el torneo Conde de Godó, Nadal quiere reafirmar su superioridad.

Nadal, que ocupa la segunda plaza de la clasificación mundial, afirma que es «el mejor número dos» de la historia, aunque considera que su rival y número uno del ránking, el suizo Roger Federer es «el mejor jugador de todos los tiempos».

«Me alegraría mucho ser el número uno, pero eso no es lo que me mueve. Soy feliz al dar el cien por cien de mí mismo», señala el deportista en una entrevista con el diario «Welt am Sonntag» en la que insiste en que su rivalidad con Federer se limita a la pista de tenis.

Nadal, quien alaba la trayectoria del tenista Novak Djokovic, que hizo historia en enero tras derrotar a Federer en el Open de Australia, criticó que los principales campeonatos europeos sobre tierra batida -Montecarlo, Barcelona, Roma y Hamburgo- se celebren este año en cuatro semanas consecutivas.

Afirma que este calendario de torneos perjudica especialmente a los jugadores y califica esa decisión de «gran error».
Nadal, que ha suscrito una petición, junto con otros veinte tenistas, para que no se renueve a final de temporada el contrato del presidente de la ATP, Etienne de Villiers, apoya que la junta directiva «busque otros candidatos».

Aunque considera que De Villiers debería seguir forman parte del órgano gestor, no ve motivo «para que no se busque a otros que puedan aportar algo bueno al deporte».

«Ha habido demasiados fallos y a los jugadores ni se nos ha escuchado ni se nos ha pedido consejo en cuestiones muy importantes», añade.
También Djokovic se ha mostrado muy crítico con el calendario y ha puesto como ejemplo las retiradas por lesión de jugadores importantes en Roma. Precisamente el tenista estadounidense Andy Roddick será baja para el Masters Series de Hamburgo por unos dolores en la espalda que le codujeron a abandonar sus semifinales en Roma. «Tras varios espasmos en la espalda, Andy ha decidido no participar en el torneo de Hamburgo», indicó su web.

Roddick abandonó en semifinales del Masters Series de Roma, después de sólo tres juegos disputados ante el suizo Stanislas Wawrinka en una situación similar a la que vivió el propio Djokovic, que salió beneficiado de la retirada de Stepanek.