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Rafa Seguí Es sabido por todos que remontar un 2-0 en una eliminatoria no es una tarea fácil. Pero también es sabido que cuando el filial mallorquinista se propone una meta, no cesa en su intento, aunque no acabe en buen puerto. Así fue el encuentro disputado ayer en Son Bibiloni ante un Almansa muy poco creativo, con contadas ocasiones y con un portero que evitó la catástrofe manchega.

En el primer tiempo, ocasiones de peligro no faltaron. El conjunto rojillo, desde los primeros compases del encuentro, avisó de que salía a por todas, con varias ocasiones de Fonseca y Emilio. En cambio, las ocasiones del Almansa fueron nulas y se limitaron a repeler las del Mallorca B. A pesar de las mil y una oportunidades bermellonas, Rubén, en un fantástico encuentro, rechazaba todos los balones y hacía que su equipo estuviera más cerca de la próxima ronda.

Pero en la segunda mitad, todo cambió. A los veinte segundos de la reanudación, Aimar remataba un saque de córner de Alcolea y adelantaba al conjunto manchego. El Mallorca no se vino abajo, sino que se motivó todavía más ya que, viendo que había dominado el encuentro, se veía capaz de remontar y llevarse el gato al agua.

Seguía el Mallorca llegando con mucha frecuencia al área de Rubén, y en una de estas oportunidades, Emilio cayó en el área por empujones y agarrones de tres jugadores almanseños. El colegiado Alemán Pérez no señalaba el claro penalti que se había cometido y segundos después, Hervías llegaba tarde a un balón, propiciando una fuerte entrada a Moraga, quedando tendido en el suelo y recibiendo el jugador bermellón la roja directa. Pero ni la expulsión de Hervías iba a detener la ilusión rojilla. A la media hora del segundo tiempo, Oller definía una combinación en el área y empataba el encuentro. Emilio Nsue no descansaba pero su trabajo no encontraba recompensa y Rubén frustraba todas sus oportunidades. El último gol del encuentro fue obra del visitante Berni después de enviar un potente chut a la derecha de Romero, quien no pudo hacer nada para evitar el tanto. Sin tiempo para reaccionar, los jugadores del Mallorca B se desanimaron y no hicieron mucho más por mejorar el resultado.

Con un marcador global de 3-1 a favor de los castellano manchegos, el filial mallorquinista ve truncada su aspiración de volver a Segunda División B, después de su descenso hace tres campañas. El Almansa, por su parte, se la jugará en la ronda definitiva ante el Ciudad Santiago, que remontó el dos a cero adverso de la ida ante el Atlético Monzón (3-0).