La alargada sombra de Björn Borg se ha intensificado en Wimbledon y Rafael Nadal es el culpable. El sueco, el último en encadenar el éxito en París y Londres, ha señalado al mallorquín como favorito al triunfo final del Grand Slam que arranca hoy en Londres y el número dos del mundo le ha dado motivos para creer en él. El manacorí y Novak Djokovic quieren hacer tambalear el reinado de Roger Federer en el All England Lawn Tennis Club, donde el suizo aspira a reivindicarse en su escenario más propicio tras su temporada menos prolífica.
El número uno del mundo, que ha dejado entrever su mejor versión en su vuelta al césped conquistando su quinto torneo en Halle, entra hoy en acción ante el eslovaco Dominik Hrbaty y Nadal lo hará mañana ante el alemán Andreas Beck después de dar brillo a su historial logrando en Queen's su primer título sobre hierba. Los protagonistas de las finales de 2006 y 2007 acaparan todas las miradas en una edición cargada de alicientes y marcada por la denuncia de amaño de partidos.
Tras haber acariciado el título en los dos últimos años y después de haber evidenciado su progresión en el presente curso, Rafael Nadal llega a la hierba londinense avalado por su regularidad y por la mejoría en aspectos fundamentales sobre esta superficie como el servicio y la agresividad al resto. No obstante, el sorteo ha vuelto a depararle una parte baja del cuadro plagada de obstáculos. Y es que tras Beck, se presumen como rivales del mallorquín Ernests Gulbis en segunda ronda, Kiefer en tercera, Stepanek o Youzhny en octavos, Gasquet o Murray en cuartos y Roddick en semifinales.
Los números de Federer sobre hierba (75 victorias en 88 partidos en toda su carrera) y cinco títulos seguidos en Wimbledon, le confieren el papel de favorito para alcanzar la final, aunque en esta ocasión se las tendría que ver con Novak Djokovic en semifinales. El serbio también debuta hoy ante Berrer.
El trío de grandes aspirantes aumenta el voltaje de una cita con alicientes de sobra para engrandecer su historia cargada de leyendas. Los tres primeros escalones del circuito pueden variar de inquilino en Londres. Federer garantizará su continuidad en la cima si alcanza los cuartos de final, pero tanto Rafael Nadal como Novak Djokovic optan a apoderarse del cetro del tenis. El mallorquín conseguirá el ansiado número uno mundial si conquista su primer Wimbledon y el suizo no alcanza los cuartos de final, mientras que Djokovic podría superar a ambos si se adjudica el Grand Slam inglés y Federer no llega a la tercera ronda. El serbio vuelve a tener opciones de desbancar a Nadal del segundo puesto, algo que conseguiría en cinco supuestos: ganar el torneo y que Federer supere la segunda ronda, ser finalista y que el manacorí caiga antes de la final, ser semifinalista y que Nadal no lo sea, llegar a cuartos y que el balear pierda antes de la cuarta ronda y si alcanza la cuarta ronda y el isleño no lo logra.
Nadal tiene el sueño de conquistar Wimbledon. Ya ha estado muy cerca y vuelve a estarlo, aunque desde el primer encuentro el mallorquín precisa ganar en confianza para ir a más. El reto está servido.
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