TW
0

Agencias|LONDRES
Rafael Nadal alcanzó los octavos de final de Wimbledon tras dar un golpe de autoridad ante el alemán Nicolas Kiefer, al que superó en tres sets (7-6, 6-2 y 6-3) en el que fue el mejor encuentro del manacorí en lo que va de torneo. El mallorquín pasó apuros en la primera manga y después sacó a relucir su mejor tenis, con golpes al alcance de muy pocos, para acabar con un Kiefer, cabeza de serie número 27, que asistió sin poder hacer nada ante la exhibición de su rival. Nadal, que venía de sufrir frente a Ernets Gulbis, fue de menos a más y como ya le pasara contra el letón fue ganando poco a poco en agresividad para terminar superando a un combativo Kiefer, que presentaba en las semifinales alcanzadas sobre la hierba de Halle su mejor aval.

La primera manga fue tremendamente igualada y hubo que acudir al 'tie-break' para dilucidar el vencedor del primer parcial. Ambos se mostraron muy seguros al servicio y, a pesar de no contar ninguno de los dos con los 'aces' como mejor arma, fueron resolviendo sus saques y concedieron tan sólo una bola de 'break', que ninguno de los dos jugadores pudo aprovechar. Con el primer set ya decidido, se puso de manifiesto de nuevo que el juego desplegado se corresponde a un estado anímico y es que lo que en la primera manga era un encuentro muy igualado pronto se tornó a una manifiesta superioridad del manacorí, que empezaba a sacar a relucir todo su repertorio. Con la moral mellada y por debajo en el marcador, Kiefer arriesgó y comenzó a cometer errores, mientras que Nadal crecía en su juego, se adjudicaba puntos brillantes y lograba dos 'breaks', en el segundo y en último juego, para poner rumbo a octavos tras el 6-2 cosechado en este segundo parcial. La tercera manga siguió el mismo guión de la segunda y Nadal volvió a conseguir un 3-0 de inicio que ya hacía muy difícil la remontada germana. De esta manera, el número dos del mundo, alcanza los octavos de final por la puerta grande.