El ejército de Manzano empezó a sufrir bajas muy importantes en cuanto se cerró la puerta de la campaña anterior, pero a día de hoy, ya se han cerrado ocho incorporaciones y en las próximas semanas podrían llegar dos o tres más.
Además, el insiste en que Grande le trasladó al grupo un mensaje de calma después llegar a un preacuerdo con Paul Davidson y que hasta el 31 de agosto no se tocará nada: «Seguiremos trabajando como hasta ahora, sin cambios. A partir de ahí, dependerá de la situación que se produzca, pero lo importante ahora es configurar la plantilla como lo estamos haciendo. El presidente transmitió tranquilidad y confianza».
Los próximos objetivos de Pons está marcados desde hace tiempo y sólo hace falta afinar un poco la búsqueda. «Es evidente que estamos trabajando para traer un central y un delantero. El gol es complicado de encontrar y cuando lo haces, lo tienes que pagar. Pero creo que podemos encontrar una buena solución», explicaba ayer en el hotel Sonneck.
«También pensamos en otra posición y puede haber algo más, pero dependerá de las salidas que puedan producirse», añadía.
En esa misma línea, Nando Pons dejó muy claro que este fin de semana se tomarán ya algunas decisiones importantes. Tanto el director deportivo como el entrenador querían esperar a lo que ocurriera ayer en Mittersill frente al Wolfsburgo (derrota por 1-0) para pronunciarse. Ahora habrá que ejecutar esas intenciones. «Con Manzano hablo a diario y de muchas cosas. El otro día mantuvimos una reunión más formal, pero esperaremos al partido del Wolfsburgo. Cada amistoso de estos es una fuente importante de información. Los entrenadores siempre quieren más y bien que hacen. Y si vamos a reforzar al equipo en dos o tres posiciones más es porque nos lo ha pedido. Está relativamente satisfecho pero es exigente», explica.
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