TW
0
M. Alzamora/P.Candia El presidente del Real Mallorca, Vicenç Grande, mantuvo ayer una reunión de tres horas de duración con los administradores concursales que supervisan el concurso de acreedores en la que está inmersa la empresa Drac. Al encuentro, que tuvo lugar en la sede del grupo promotor, asistieron además de Grande y sus asesores jurídicos, los tres administradores nombrados por el juez: Jorge Sainz de Baranda, Raimundo Zaforteza y Salvador Fornés.

En este encuentro el presidente del Mallorca entregó una copia del preacuerdo de compra al que ha llegado con el inglés Paul Davidson y los administradores recordaron que esta operación debe realizarse bajo su supervisión, aunque no entran en el día a día del club ni en su gestión interna.

Finalmente la operación de venta se cerrará por un montante que asciende a 38 millones de euros, aunque esta cantidad puede variar dependiendo del resultado final que presenten las cuentas del club. Además del control de los administradores, se acordó también mantener una reunión semanal entre todas las partes para seguir con detalle tanto esta operación como las restantes en las que está implicada la empresa de Grande.

Al margen de esta larga reunión, el presidente también mantuvo un encuentro al mediodía con el que debe ser el próximo propietario del club balear, el inglés Paul Davidson. El empresario del Reino Unido analizó la auditoria presentada por el club y que es clave para que el magnate pueda acceder finalmente a controlar la propiedad de la SAD Balear.

La intención de Davidson es seguir analizando las cuentas de la entidad antes de dar el paso definitivo y comprar el club por una cifra que a día de hoy es de 38 millones, pero que no se descarta que pueda variar en las próximas semanas.

En principio todo sigue le camino marcado hace apenas una semana cuando ambas partes hicieron público el preacuerdo alcanzado por la compra venta del club. Grande insistió en el hecho de que se trataba de un preacuerdo, mientras Davidson hablaba ya de planes de futuro en todos los sentidos y en que el principal objetivo era confeccionar un club potente para poder ser un equipo importante en el panorama europeo. El final de la operación se prevé para dentro de dos semanas y que antes del uno de septiembre el empresario inglés sea a todos los efectos nuevo propietario del Real Mallorca SAD.

Su intención es la de mantener en la presidencia a Vicenç Grande y mantener el mismo esquema de trabajo a nivel interno. Sin embargo, es previsible que Davidson pueda dejar en el club una persona de su máxima confianza que siga el día a día de la entidad.