Roger Federer, en el centro y junto a Reto Staubli, ayer a la salida de la iglesia de Sant Francesc. Foto: JOAN LLADO

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Tolo Jaume Las semifinales de la Copa Davis no dan tregua a Rafael Nadal, pero Roger Federer sí ha tenido la oportunidad de saborear la conquista del US Open con un breve paréntesis vacacional en tierras mallorquinas. El número dos del mundo, que reaparecerá en el Masters Series de Madrid, asistió ayer al enlace de su amigo de la infancia y asesor Reto Staulbi, que contrajo matrimonio con la hija del director de finanzas del Estado, Àngel Bizcarrondo, en la iglesia de Sant Francesc en Palma.

El pentacampeón del Abierto de Estados Unidos asistió al enlace acompañado por su novia Mirka Vavrinec y su presencia despertó expectación entre los turistas que tomaban instantáneas del edificio gótico. Los curiosos, que se citaron ante el espectacular vehículo que trasladaría a los novios, se olvidaron por un momento del retablo mayor en estilo barroco rematado por la imagen de San Jordi a caballo sobre un dragón y optaron por buscar imágenes del genial jugador suizo, que acompañó a Reto Staubli a su salida de la iglesia camino del claustro donde culminaría la estancia del suizo en Ciutat.

Reto Staubli ha viajado como miembro del equipo de Roger Federer durante buena parte de la temporada desde que el tenista optó por afrontar el curso sin entrenador. El asesor del de Basilea ha alternado los entrenamientos con sus compromisos como ejecutivo bancario. Reto Staubli, que formó parte del equipo nacional helvético, y el tenista suizo se conocen desde la época en la que tomaban parte de las competiciones entre clubes dando sus primeros raquetazos.

El suizo tendrá unos días de descanso antes de retomar los entrenamientos y apenas dispone de tiempo para coincidir en la Isla con Rafael Nadal, puesto que el zurdo de Manacor tuvo que viajar a Barcelona y en breve se desplazará a Madrid para iniciar los entrenamientos en la disciplina del equipo de Copa Davis capitaneado por Emilio Sánchez Vicario.

Cabe destacar que Roger Federer visitó por primera vez la Isla con motivo de la Batalla de las Superficies que le enfrentó al actual número uno del mundo en el singular duelo desarrollado en el Palma Arena sobre una pista mitad de hierba y mitad de tierra batida. El jugador suizo y el tenista mallorquín mantienen una buena relación a pesar de la rivalidad deportiva que ha llevado sus duelos a engordar la lista de enfrentamientos legendarios del deporte de la raqueta y siempre se han profesado una gran admiración en sus declaraciones públicas alimentando una buena sintonía que les llevó a ser candidatos de forma conjunta al premio Príncipe de Asturias al Deporte en 2007.