El escolta de los Blazers, Rudy Fernández, agradeció durante su presentación como nuevo jugador del equipo el apoyo mostrado en su llegada a Portland en un recibimiento que calificó de «increíble», y que, reconoció, fue «una agradable sorpresa».
«Ya había dicho que el dinero no era un problema para venir a jugar aquí, sólo quería sentirme valorado y todo el mundo de esta franquicia me ha hecho sentirme importante, la prueba ha sido el recibimiento en el aeropuerto que fue increíble, sin duda, una agradable sorpresa», afirmó en presencia de la senadora del estado de Oregón Katy Brown; el actual entrenador de los Blazers, Nate McMillan y del director de programas del equipo, Chris Bowles en la sala de prensa.
En la primera fila se sentaron su agente y traductor, Gerard, y el manager general del equipo, Kevin Pritchard, que al hacer uso de la palabra señaló: «Estamos encantados de que Rudy Fernández vaya a vestir, por fin, la camiseta de Portland; creo que alcanzará pronto el nivel del equipo». Y es que el joven escolta de los Blazers comenzara los entrenamientos después de un merecido descanso nada más conseguir la medalla de plata de los Juegos.
Por su parte, el entrenador del equipo, Nate McMillan definió a Rudy como «un jugador especial». Sin embargo, el medallista de plata en Pekín comparte posición con el 'All-Star' Brandon Roy, por lo que partirá desde el banquillo, algo que no preocupa al técnico que considera que el español tiene «talento de sobra para incrementar sus minutos de juego» e incluso poder jugar junto al Roy «cuando éste juegue de base o de alero».
En este sentido, McMillan dejó claro que le hará jugar «todo el tiempo que le necesite sobre el parqué, si demuestra de lo que es capaz de hacer, él ya sabe que estará en pista los minutos importantes, no tiene que conocer más que dos palabras en inglés 'defender' y 'meter la canasta en el aro'», ironizó sobre los problemas con el idioma que pudiera tener el escolta.
Mientras, el manager general de los de Oregon Kevin Pritchard reconoció que tiene «tantas ganas de verle en la cancha como las que tenía el año pasado con Greg Oden». «Esperamos grandes cosas de él y, sobre todo, pensamos que su aportación será inmediata, porque reúne todo lo que queremos en un jugador, es un gran chico y un buen compañero de equipo, lo que hará aún mejores a sus compañeros, probablemente por todo ello estamos deseando verle antes que a cualquier otro de los nuevos», admitió.
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