Gregorio Manzano coloca un peto en una de las porterías de la ciudad deportiva de Son Bibiloni. Foto: MONSERRAT

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Llega la cuarta jornada del campeonato y con ella, el primer punto de inflexión de la travesía mallorquinista. El equipo que entrena Gregorio Manzano reaparece en su cuartel general, aunque esta vez, carga con la responsabilidad de abrir la cuenta de victorias. No será fácil. Los baleares reciben a un Numancia agigantado después de cubrir con dignidad la etapa reina de su calendario particular (Barcelona, Madrid y Villarreal) y las previsiones anuncian turbulencias. Para los locales se han agotado las excusas. A la cuarta, debería ir la vencida. (ONO Estadi, PPV, 20.00 horas).

El Mallorca volverá a forzar un despegue que lleva casi un mes aplazado por las circunstancias. El juego del equipo no termina de cuajar y eso está demorando la aparición de buenos resultados. Los rojillos han mostrado detalles, buenos y malos, y aunque el grupo no se ha desplomado, tampoco termina de arrancar. Sin embargo, ha llegado la hora de hacerlo. El partido de hoy no admite titubeos y un tropiezo, por pequeño que sea, llenaría el entorno de dudas.

Dificultades
Manzano, que sigue sin encontrar la pócima del éxito con los ingredientes que tiene en el vestuario, ha vuelto a hallar más problemas de los previstos a la hora de preparar su abordaje al conjunto soriano. Para empezar, tiene que volver a reformar por completo la defensa, que en los tres capítulos del torneo ha cambiado continuamente de aspecto. David Navarro, que parecía asentado en el once, regresará a la grada para cumplir el partido de sanción que se ganó el domingo en Riazor y Ayoze, que se había granjeado la titularidad en Son Bibiloni, se quedará al margen del compromiso por una contusión en la rodilla izquierda. Así las cosas, el técnico jienense no tiene demasiadas alternativas atrás. Josemi se instalará en el flanco derecho, Corrales lo hará en el izquierdo y Ramis irrumpirá en la parcela central como pareja de baile del portugués José Carlos Nunes.

Lo que es una incógnita es la fórmula que empleará Manzano para edificar el juego bermellón a partir del centro del campo. Las bandas parecen adjudicadas a Varela y Arango, pero en la sala de máquinas hay varias posibilidades, todas ellas válidas. Y por delante, más interrogantes. Aduriz, ya recuperado de los problemas que se trajo de Coruña, está listo para la acción y tanto Trejo como Webó, o incluso Alhassane Keita, tienen opciones de colarse en el campo de inicio.

El Numancia, por su parte, se adentra en su Liga tras pasar por el filtro de los más poderosos. Las derrotas consecutivas ante Real Madrid y Villarreal comienzan a preocupar a los responsables del equipo soriano, aunque el balance que se hace del complicado inicio de Liga que han padecido es positivo, según reconoce el propio Sergio Kresic.

El ex entrenador del Mallorca cuenta, entre otras, con la baja del delantero Antonio Guayre por segunda vez esta temporada. El canario sufre una rotura en el bíceps de la pierna derecha y tiene por delante una recuperación de tres semanas, por lo que se vuelve a aplazar su estreno oficial como futbolista del club soriano.

Kresic podría tener previstos varios cambios para esta noche. Tampoco se descarta la posibilidad de que el preparador croata efectúe alguna variación en el sistema de juego, pasando del 4-1-4-1 de los tres primeros partidos, (con Nagore entre líneas y Gorka Brit en punta), a un esquema más ofensivo. Su única intención es rebañar algo de Son Moix.