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Tolo Jaume El Centro de Tecnificación de piragüismo en el Lago Esperanza de Alcúdia empieza a trasladarse al plano oficial tras más de quince años de reclamación por parte de la Federació Balear de Piragüisme (FBP). El conseller d'Esports, Mateu Cañellas, y el director general del departamento, Gabriel Gili, presentaron junto al presidente de la (FBP), Juan José de Salabert, el proyecto que será trasladado mañana a los responsables del Consejo Superior de Deportes (CSD).

Mañana llega a la Isla el director general de deportes del CSD, Albert Soler, para analizar el Palma Arena, la instalación de tenis de Manacor y conocer de primera mano el proyecto del centro de tecnificación de piragüismo en el Lago Esperanza. Y es que Mateu Cañellas trasladará al CSD las diferentes propuestas que ha puesto en marcha para conseguir los Centros Especializados de Alto Rendimiento (CEAR) de tiro con arco, lucha, natación y gimnasia.

Sin embargo, uno de los puntos del día que está marcado en rojo en la agenda de la visita es la visita a Alcúdia, donde los gestores de la federación y los representantes institucionales explicarán las prestaciones de un proyecto que meses atrás contó con el aval del anterior director general de deportes del CSD, Manuel Fonseca, que era la mano derecha de Jaime Lissavetzky y había mostrado su compromiso con el proyecto. No en vano Fonseca fue presidente de la Federación Española de Piragüismo entre 1977 y 1984 y en su momento se posicionó a favor hasta que abandonó su cargo meses atrás.

La coordinación entre las diferentes instituciones implicadas es uno de los obstáculos que tiene que salvar el proyecto, aunque la actual situación política invita al optimismo. Costas, el CSD, la Conselleria d'Esports, Medi Ambient y el Ajuntament de Alcúdia tendrán que unir sus esfuerzos para sacar adelante la iniciativa. La renovada sintonía entre el Ejecutivo autonómico y el central y la coincidencia política entre el Consistorio alcudienc y los departamentos implicados del Ejecutivo autonómico permiten a los responsables de la (FBP) albergar esperanzas.

En cualquier caso, el principal escollo es retirar todos los escombros del fondo del lago. Dragar el lago supondría una inversión cercana a los cuatro millones de euros y la operación se realizaría hasta conseguir una profundidad mínima de dos metros, tal como contempla la normativa de los campeonatos internacionales y tal como necesitan los piragüistas para entrenar y competir con todas las garantías. En 2002 ya se planteó la posibilidad de dragar el lago con un presupuesto de 3'9 millones de euros, pero problemas en el sistema de dragado frenó cualquier movimiento. Actualmente el proyecto ya dispone de un sistema que cuenta con el beneplácito de Costas, que espera el respaldo del CSD para dar luz verde a la iniciativa y también del ámbito ecológico, puesto que durante mucho tiempo se han vertido escombros y residuos de forma ilegal.

El proceso de dragado podría durar alrededor de un año y medio o dos y una vez concluido ya se podrá entrenar de forma inmediata. Actualmente en el lago sólo se disputan los Campeonatos de Balears y competiciones para las categorías inferiores que no precisan tanta profundidad. Una vez adecuada la profundidad se podría sacar un máximo rendimiento de forma inmediata, ya que la gran oferta hotelera de la zona abriría la posibilidad de albergar concentraciones de equipos internacionales. Los hoteles podrían habilitar el espacio para el almacenaje y a medio plazo se podrían habilitar hangares, vestuarios y zona técnica en los terrenos anexos que son de calificación mixta y que precisarían del visto bueno del Ajuntament de Alcúdia, que podría valorar positivamente la apuesta por el binomio turismo y deporte en la zona.

La parcela técnica recaerá en manos del técnico de la Escola Balear de l'Esport, Jesús Cobos, que dirigió al equipo nacional y vivió de cerca los pasos de Aranjuez como escenario para albergar las pruebas de los Juegos de 2016 si se celebraran en Madrid.