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Guillermo Ortego La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha remitido un comunicado al Atlètic Balears en el que informa al club que preside Fernando Crespí que no puede hacer ficha a los ocho jugadores africanos procedentes de Inverfútbol al no disponer de toda la reglamentación en regla.

Los requisitos que pide la Española para que a un jugador extracomunitario se le pueda hacer ficha son dos, disponer de pasaporte y tener tarjeta de residente. Los jugadores africanos con los que cuenta en estos momentos la entidad blanquiazul, ocho en total, están en posesión del primer documento pero no del segundo. Por tanto, necesitan una tarjeta de residente, que se consigue con un contrato laboral. En este caso, a los implicados se les debe hacer un contrato profesional, pero el problema reside en que la Federación sólo considera profesionales a los equipos que militan en Primera y Segunda División A y no a los de la categoría de bronce, de ahí el problema.

Crespí se muestra tranquilo ya que aunque afirma que «la Federación no contempla la Segunda B como una categoría profesional y no pueden jugar», asegura también que «si no pueden jugar, vendrán otros jugadores».

En esta línea, el Atlètic Balears se aferra a un artículo del BOE (Boletín Oficial del Estado), en el que se habla de «clubes de Primera y Segunda» como profesionales, sin especificar entre Segunda División A y B.