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Agencias|MADRID
Después de toda una carrera vinculado al número 48, Jorge Lorenzo ya ha decidido el dorsal que lucirá en su carenado en la temporada 2009. El piloto mallorquín, que desde su irrupción en el panorama internacional se asoció al número con el que siempre compitió su ex mánager Dani Amatriaín, ha despejado la incógnita y en la nueva temporada portará el 99. Un cambio sustancial teniendo en cuenta que tanto el merchandising como algunos de sus logos o su propia página web han permanecido vinculadas al número 48 con el que siempre compitió en el Mundial a excepción de su tercera temporada en 250.

Jorge Lorenzo, que había sondeado a los aficionados para la elección de su nuevo dorsal a través de la red, inicia una nueva etapa con Marcos Hirsch como hombre de confianza y se muestra muy optimista tras su condición de mejor debutante de la categoría reina en 2008. En cualquier caso, Lorenzo advirtió ayer que hasta dentro de casi dos mes, cuando se entrene en Sepang (Malasia), se limitará a la preparación física: «Con la moto de carrera voy a hacer poco, tenemos muy limitados los días de entrenamiento. Haré físico a diario y probaré con la moto de campo».

Además, el piloto no sabe aún lo que tendrá en Sepang por parte de Yamaha. «No lo sé, no ha hablado con Yamaha y en Sepang sabré lo que tengo», indicó el balear, que se sintió «muy bien» en los últimos entrenamientos en Jerez de finales de noviembre. «Hicimos sólo dos entrenamientos y las sensaciones que tuve fueron muy positivas. Los neumáticos funcionaron muy bien y sólo me falta acostumbrarme a las sensaciones para bajar el tiempo.