El banquillo del Mallorca es el más estable del subsuelo de la Liga. Los números se cobraron ayer la octava víctima de la temporada y tras la destitución de Sergio Kresic como entrenador del Numancia (el club soriano la oficializó ayer), Gregorio Manzano puede presumir de ser el único técnico instalado en la zona baja que conserva el puesto desde el que inició la campaña.
Si el Mallorca cogió aire gracias al reconfortante triunfo amasado en Los Pajaritos (0-1), el Numancia quedó atrapado en un laberinto que motivó a los gestores del club castellano a buscar estímulos y soluciones. El veterano preparador croata, que dirigió a los baleares durante un tramo del ejercicio 2001-02, agotó su crédito durante la incursión isleña y la ha cedido el testigo a José Rojo Martín, 'Pacheta', hasta ahora director deportivo de la entidad, para que busque la salvación de aquí a final de temporada.
El cese de Kresic es el octavo del curso actual. Hasta el momento, otros seis equipos han optado por el cambio de entrenador y entre ellos destacan especialmente los ubicados en la franja peor iluminada de la tabla.
Los primeros en movilizarse fueron los responsables de Recreativo y Osasuna, que tardaron sólo seis jornadas en remover los cimientos de su proyecto. Lucas Alcaraz accedió al banco onubense en sustitución de Manolo Zambrano y José Antonio Camacho relevó a José Àngel Ziganda en el vestuario navarro. En cuanto a los andaluces, la decisión tuvo un efecto positivo en sus inicios y el equipo se ausentó durante muchas semanas de los alrededores del incendio. Sin embargo, el paso del tiempo ha ido restándole potencia y ahora está a sólo cuatro puntos del foso. Los navarros, por su parte, también han sufrido muchísimo para obtener resultados y aunque han vuelto a la superficie, su futuro sigue colgando de un hilo.
El Espanyol, el más activo en este sentido, demoró un poco más el relevo en el apartado técnico, pero no le ha servido de nada. Sustituyó a Tintín Márquez por Mané (13ª jornada) y a éste por el ex futbolista Mauricio Pochettino (19ª). A día hoy es el peor equipo de Primera (es último, a tres puntos de la salvación) y su estado de salud es crítico, ya que en las próximas semanas deberá recorrer las rampas más duras del calendario.
Los otros clubes que han recurrido al revulsivo técnico están alejados del peligro, aunque en el caso del Almería, deberá andarse todavía con mucho cuidado.
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