Así, el balear demostró que no es casualidad que viene de ganar la Challenge de Mallorca -en la que logró una victoria de etapa en Bunyola- y que su puesta a punto está un poco por encima de la del ganador del Giro y Vuelta del año pasado, superándole en el sprint final en la llegada al alto de segunda categoría.
De este modo, Colom se enfundó igualmente el maillot de líder, prenda que cambia por tercer día de propietario y que hasta ayer era propiedad del también español Koldo Fernández (Euskaltel-Euskadi).
Colom y Contador se destacaron del grupo y entraron con seis segundos de ventaja sobre Rubén Plaza (Liberty Seguros), que completó el festival español en la etapa entrando a seis segundos y hoy podría conquistar el liderato en la contrarreloj.
Esta etapa tendrá una distancia de 33'7 kilómetros entre Castro Marim y Tavira, y el alicantino tiene buenas dotes contra el crono, mientras que el jefe de filas del Astana tendrá su primera prueba, poco después de que en California se enfrente a una situación similar su compañero de equipo Lance Armstrong.
Colom se mostró «muy feliz» por el triunfo, y destacó «el gran trabajo del Astana, me lo pusieron muy difícil, pero a 200 metros, decidió atacar y me fue bien», explicó el de Bunyola.
De esta manera, Colom se posiciona en vistas a conseguir una nueva victoria en una carrera por etapas, tras las logradas en Mallorca, por partida doble, en la Vuelta a Andalucía y la Vuelta a la Comunitat Valenciana, que adornan el palmarés del bravo corredor mallorquín.
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