Cristóbal Muñoz21/02/09 0:00
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El Bàsquet Mallorca no desaprovechó la oportunidad de noquear a todo un León en horas bajas (85-59) para dar un paso al frente en sus aspiraciones de cara a la permanencia, hacerse con el average directo y recuperar la senda del triunfo para dar un golpe de mando, apoyándose en un Joan Riera decisivo. Y es que el base mallorquín, además de ser el mejor sobre el parqué, se encargó de romper el partido a ritmo de triples. Tres aciertos consecutivos desde más allá de 6'25 en la recta final del tercer parcial acabaron con las esperanzas de un Grupo Begar León que casi siempre fue a remolque, y cimentó una victoria de calidad, que permite revertir las malas sensaciones que quedaron tras el paso por Valladolid, y en la que también gozaron de protagonismo jóvenes talentos como Miki Servera o Biel Torres, beneficiarios de minutos cuando todo estaba decidido en el Palau.

Y eso que las cosas comenzaron mal. El León se iba en el electrónico (2-7), pero un parcial de 17-0 invertía la dinámica del juego (19-7), cerrándose el primer cuarto con un 21-13 que alimentaba las ilusiones de los hombres de Xavi Sastre.

La reacción leonesa no tardó en llegar. Con Stacey como puntal, metieron el miedo en el cuerpo al Mallorca, que apenas se vio uno arriba (37-36), aunque hubo margen para reconducir la situación camino del descanso (43-36).

La tónica del partido mantuvo a un Mallorca intenso en defensa y correcto en ataque, ante un León que funcionaba a fogonazos. Hasta que Riera se propuso dinamitar la contienda, con tres triples letales para los visitantes, que se vieron catorce abajo (64-50), para precipitarse por completo al vacío en el tramo final, cuando el Mallorca jugaba con descaro y la tranquilidad de haber atrapado la novena victoria de la temporada. Una máxima de veintitrés (73-50) reflejaba las abismales diferencias entre ambos rivales y que los de Xavi Sastre son capaces de plantar cara a cualquiera.