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Carlos Román|BARCELONA
Gregorio Manzano manifestó al término del partido disputado ayer en Montjuïc que su equipo debió aguantar más el marcador con el uno a tres, pero destacó el esfuerzo y la actitud del Mallorca sobre el terreno de juego. «Permitimos que se metieran en el partido, deberíamos haber aguantado un poco más y con el marcador de uno a tres incluso tuvimos opciones para conseguir un resultado más elevado. Ellos jugaban a la desesperada y con el tres a tres tuvimos incluso opciones. El domingo pasado sumamos un puntazo y hoy nos vamos con la sensación de haber perdido dos puntos tal y como se ha desarrollado el partido», comentó el andaluz.

Respecto a los goles encajados en dos partidos "seis" y a los goles anotados "también seis" Manzano destacó que es una situación poco habitual en el fútbol. «Es una cosa sorprendente lo que nos ha ocurrido en dos jornadas consecutivas, empatando a tres goles en dos encuentros, es una casualidad tanto a favor como en contra. Trabajamos bien en la primera parte, pero en defensa cometimos algún que otro desajuste. El equipo lo contrarresta con lo goles que puede marcar y me alegra que esto sea así. Hay que intentar no encajar tantos goles porque si encajas tres, hay que hacer cuatro para lograr ganar», manifestó.

Una de las claves del encuentro fue la tarjeta roja que vio Moisés, según el entrenador del Mallorca. «El partido con la expulsión se ha vuelto más de ida y vuelta ya que Moisés daba equilibrio. Ellos tuvieron que irse a arriesgar para buscar la victoria y de ahí que fuese un encuentro mucho más que ida y vuelta», declaró Manzano.

Por su parte el técnico de Espanyol, Mauricio Pochettino, se mostró satisfecho con el empate conseguido. «Salimos desde el primer minuto a por los tres puntos, pero el empate hay que darlo por bueno después de lo que ha ocurrido. El árbitro ha anulado un gol a Tamudo que pudo cambiar el signo del partido», declaró el argentino.