TW
0
F.Fernández Si en Almería 2005 la lucha balear fue uno de los puntales del espectacular medallero balear -1 oro, 1 plata y 3 bronces-, la lucha balear multiplica sus prestaciones cuatro años después. En plena cuenta atrás hacia los Juegos Mediterráneos de Pescara (26 de junio a 5 de julio), cinco luchadores se han ganado a pulso una plaza en el equipo nacional que viajará en cuestión de días hacia tierras italianas.

Pese a las ausencias de los dos puntales de esta modalidad a escala balear y estatal, los olímpicos Moisés y Fran Sánchez, la saga que ha dado lustre a la lucha española ha depositado su confianza en el relevo generacional y el buen trabajo del Centro de Tecnificación de la EBE, que puede presumir de tener en nómina a buena parte de los miembros provisionales de la misión.

Opciones
María del Mar Serrano (libre, 51 kilos) y Sara Sánchez (48) defienden el bronce cosechado en sus pesos cuatro años atrás, y a ellas se une la gran promesa de la lucha estatal. Con la plata del Europeo júnior aún reciente, Karima Sánchez -campeona de Europa cadete en 2008- competirá en libre (55 kilos) con serias opciones de regresar con un metal al cuello. La representación masculina no tiene nada que envidiar a la de Almería. Ismael Navarro (grecorromana, 66 kilos) cubrirá la baja de Moisés y Agustín Sánchez (libre, 60 kilos) intentará prorrogar el reinado de la dinastía.

Vicente Lillo, bronce en los Juegos de 2005 (grecorromana, 55 kilos), se enrolará dentro del equipo técnico y pasará al otro lado del tapiz, en el que podría acompañarle Eusebio Capel.

Cartel
Los cinco luchadores mallorquines forman la delegación más notable por deportes, pero no serán los únicos. Tomeu Nadal y Emilio Nsue se han ganado un hueco dentro del equipo de fútbol, que intentará reeditar el oro que Iván Ramis y compañía se llevaron en Almería. Nuria Vega repite, con la plata como listón, dentro de tiro olímpico, mientras que María Fuster y Marco Rivera serán las dos bazas en la piscina, como referencias nacionales en las cortas distancias y el mediofondo, a la espera de que la lista pueda seguir creciendo.