Certificado el preacuerdo entre Mateu Alemany y Carlos González, el cambio de propiedad es inminente y a medida que vaya pasando el tiempo, los acontecimientos y las noticias se irán precipitando. Inicialmente el empresario tinerfeño confirmará con la auditoría que está elaborando los datos económicos del club y posteriormente reorganizará la institución en todas sus áreas.
No tiene porqué haber ningún cambio traumático, pero es lógico que el que será nuevo máximo accionista del club irá poco a poco dando a todas las esferas su toque personal. Respecto a la confección del consejo de administración, la idea inicial es que Joan Buades ocupe el cargo el presidente, Carlos González será el propietario y consejero delegado y 'mallorquinizará' el consejo como ya hizo en su día Antonio Asensio. Los actuales consejeros se mantienen a la expectativa y prácticamente todos han manifestado de forma oficiosa su intención de ponerse a disposición del nuevo propietario. Sin embargo, no todos seguirán. De los actuales miembros de este órgano que arropa a Alemany -ver la fotografía que ilustra esta información- tres de ellos tienen muchas opciones de continuar Àlvaro Delgado, Francisca March, Xavier Cabotà y Joan Buades, este último como presidente.
Por definir está el papel que jugará el vicepresidente José Miguel García, mientras que es poco probable la continuidad de Antoni Tugores, Pere Terrassa, Miquel Vaquer y Luis Huerta. No caben todos, principalmente porque es lógico que el nuevo propietario tenga mayoría en el consejo, aunque su deseo, desde el primer momento, ha sido el de contar con un número importante de consejeros mallorquines provenientes del actual órgano de gobierno del club. Lo que parece claro es que Alemany no desempeñará ningún papel en el nuevo organigrama.
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