Rubén González, en una imagen captada ayer, a su llegada a Son Sant Joan. g Foto: JAUME MOREY

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Miquel Alzamora Martí Asensio anunció ayer los dos primeros fichajes del Real Mallorca 09/10. Se trata de Bruno China, centrocampista defensivo que proviene del Leixoes de Portugal y de Rubén González, central del Celta de Vigo. Bruno fue elegido por la prensa lusa como uno de los medios más regulares de la pasada temporada y su contratación es una clara apuesta de la propiedad del club balear.

La llegada del pivote portugués posiblemente llene un hueco en el centro del campo, pero no ilusiona. Es un desconocido y su nombre hoy por hoy deja indiferente a la hinchada. No se harán más socios por el fichaje de Bruno, pero también es justo darle el margen de confianza que todo jugador necesita para ganarse a la afición. Sin embargo, el trasfondo de esta contratación sí es muy importante. Y lo es porque refleja la primera batalla que ha conseguido ganar el nuevo consejero delegado del club, Javier Martí Asensio, a la dirección deportiva, con Fernando Pons al frente y al entrenador Gregorio Manzano. Estos dos últimos apostaban por Javi Fuego, centrocampista del Recreativo, pero ha prevalecido la opinión de la propiedad y quien vendrá será este jugador luso. Guste o no guste a Pons y compañía. De puertas para afuera «se trabaja en equipo», asegura Javier Martí. Nadie lo duda, pero en la primera crisis relacionada con la planificación de la temporada la opinión que ha prevalido ha sido la del máximo accionista. Se acabó pagar comisiones a agentes, aceptar el precio de los equipos rivales sin agotar todos los plazos y plegarse a las leyes de los otros. Económicamente no se superará el margen que establezca la SAD Balear. «La operación de Bruno China se ha cerrado en las condiciones que nosotros queríamos desde un primer momento y habitualmente se cerrarán en los números que nosotros creamos oportunos», comentó el consejero delegado.

Manuel Bruno China se convierte de esta manera en la primera incorporación del Mallorca y llegará el lunes, justo a siete días del inicio oficial de la Liga. El centrocampista se ha comprometido por tres temporadas con el club mallorquinista por lo que será jugador del primer equipo hasta el 30 de junio de 2013.

Bruno China milita en el Leixoes desde el año 2000 y esta última temporada disputó un total de 29 partidos.
El nuevo jugador mallorquinista ha sido elegido esta temporada mejor medio centro defensivo de la Liga portuguesa, por lo que inicialmente sus credenciales y referencias son muy buenas.

Martí Asensio apuntó que el jugador llega al club tras «consensuar» su fichaje entre Pons, Manzano y él, pero la apuesta es de la propiedad. «Estoy convencido que nuestro entrenador estará muy contento con este futbolista», comentó el hijo del máximo accionista.

Presentaciones
A partir de ahí, el club confía en que los fichajes puedan ir cayendo día tras día y la próxima semana puede producirse un auténtico carrusel de presentaciones. A las de Bruno China y Rubén pueden seguirle la de Borja Valero, también la de un lateral y un interior.

La estrategia de la propiedad está clara, hay que gestionar el déficit que se han encontrado y esto sólo es posible si se contiene al máximo el gasto y si los parámetros de las compras las marca el club balear y no el rival.

De esta forma, por Bruno Chino se ha pagado una cantidad cercana a los cuatrocientos mil euros, mientras que el defensa del Celta viene libre. Dos incorporaciones que alivian un tanto los problemas de Manzano, pero resta todavía lo más importante para la primera jornada de Liga ya que las ausencias de Josemi y Varela por sanción obligan a contratar a un lateral derecho y a un interior para no tener que improvisar más de la cuenta ante el recién ascendido Xerez. El problema permanece, pero con los primeros fichajes, ya llueve menos.