Federer será el rival de Nadal

Federer, número dos mundial, minimizó a un rival que pareció estar pensando en la final de la Copa Davis de la próxima semana. La solvencia y paciencia del helvético, que no ha cedido un set en lo que va de torneo, fue más que suficientes para doblegar a un Djokovic empequeñecido, más errático que de costumbre.

El de Basilea se medirá en esta pelea de maestros al español Rafa Nadal, que jugará por primera vez por ser el mejor de los mejores. Una final inédita pese al dominio de ambos en el circuito masculino y que añade prestigio a una cita sin igual en un escenario irrepetible.

Y es que desde el comienzo destacó el poderío de Federer, tan exquisito como siempre, tan elegante desde el fondo de la pista que muchas veces da la sensación de deslizarse sobre el azulado sintético londinense. El suizo rompió el primer saque de 'Nole' y encauzó un triunfo de postín en menos de una hora y 20 minutos.

Con el 2-0 y la consolidación al juego siguiente, Djokovic decidió tirar la toalla y entregar la primera manga a su oponente. Lógicamente Federer tampoco sufrió un excesivo desgaste y aguantó con ansia al segundo envite, donde el de Belgrado cambió su registro.

Con el 6-1 de Federer en el set inicial, Djokovic despertó por la insuficiencia del resultado, así como por la mala imagen que daban sus guarismos. Ante esto, el número dos mundial --que ha vencido en cuatro ocasiones este certamen-- cedió margen a su rival.

Un margen de tres juegos previa rotura del balcánico, que no cambió el gesto de la cara de Federer. El ex número uno mundial ganó los tres siguientes e igualó la contienda, que se decidió por la clase del suizo, que dejó clavado en el sitio a Djokovic en más de una ocasión.

Con el 4-4, Federer contó con tres bolas de 'break' y no fue hasta la segunda cuando dejó listo para sentencia a su rival. El 5-4 fue la antesala perfecta para que el tenista de Basilea cerrarse el enfrentamiento en el siguiente servicio.

De esta forma, Federer luchará por conseguir su quinto cetro en el Torneo de Maestros --el último lo ganó en 2007-- y lo hará ante su eterno rival, el joven mallorquín que un día le pidió permiso para robarle protagonismo en las portadas, para llevarse los títulos que antes ganaba casi sin oposición.