El guardameta gallego regresa al Real Madrid tras su paso por el Sevilla. El portero también ha sido internacional absoluto. | Efe

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El Real Madrid ha cerrado el fichaje de Diego López, hasta ahora guardameta del Sevilla y que sustituirá a Iker Casillas, que ayer fue operado de una fractura sufrida en la base del primer metacarpiano de la mano izquierda y que estará de bajo entre ocho y doce semanas. Las negociaciones con Diego López se aceleraron entre ambos clubes, que alcanzaron un acuerdo para la llegada del gallego al conjunto blanco. El Madrid adquiere al jugador en propiedad, no cedido como se había comentado al principio, por un montante cercano a los 4 millones de euros, cantidad que pagó el Sevilla al Villarreal para su fichaje este mismo verano. El jugador ha fichado hasta junio de 2017. Diego López se convirtió este verano en el fichaje más caro del club hispalense y fue una petición expresa de Míchel. Sin embargo, el guardameta ahora madridista no se ha hecho con el puesto y Andrés Palop poco a ha ido ganando terreno hasta volver a situarse bajo los palos. Con la llegada de Emery el panorama no ha cambiado en exceso ya que sigue confiando en Andrés. El Madrid pensó en Diego López por ser un portero de dilatada experiencia (31 años) en la élite y conocer bien al club blanco ya que se formó en las categorías inferiores del club de Chamartín.

La llegada del guardameta nacido en Lugo se precitó ayer mismo nada más conocerse que Iker Casillas deberá estar prácticamente tres meses de baja. El doctor, Miguel del Cerro, que intervino al portero, indicó que la operación fue un éxito y su recomendación nada más concluir la operación fue «ir despacio» en la recuperación. Del Cerro explicó que «se le han reducido los fragmentos rotos y se ha sintetizado con dos tornillos» y precisó que «el periodo de baja es de ocho a doce semanas», ya que se le ha practicado «una reconstrucción total». El jefe de los servicios médicos, Carlos Díez, manifestó, respecto al tiempo de recuperación, que ahora hay que seguir el plan previsto. «Ahora vamos a tenerle una temporada muy corta con un férula, que le inmovilice y le permita descansar la cicatriz. Luego empezará con movimientos pasivos asistidos, después comenzarán los activos y finalmente empezará el contacto, que ya le marcaremos a los fisios y a los rehabilitadores», explicó. Casillas deberá estar entre dos y tres meses de baja.