«Estoy bien, estoy contento. Me he recuperado velozmente y estoy feliz de volver a casa», dijo al salir del hospital San Raffaele de Milán el compañero de Alberto Contador en el Tinkoff-Saxo, en declaraciones recogidas por los medios locales.
Aunque afirmó que tendrá que someterse a pruebas y controles los próximos días, dijo que el médico le ha tranquilizado y ahora debe esperar, con «gran optimismo».
«Tendré que hacer controles en los próximos días, pero todo ha ido bien y estoy feliz», añadió el ciclista, que se dijo «aliviado» tras la intervención quirúrgica de extirpación del testículo izquierdo a causa de la presencia de un tumor denominado seminoma.
Aunque admitió haber preguntado por volver a la bicicleta, refirió que «hay un tiempo de convalecencia que todavía no se sabe cuánto durará».
Basso volverá mañana al hospital para hacer más consultas y pensará «en las próximas semanas en todo lo demás», porque «en este momento la prioridad es la salud en pensar en una recuperación lo más pronto posible y en el mejor de los modos».
El ciclista agradeció las muestras de cariño de «compañeros, del equipo y del mundo del ciclismo en general», una «cosa bellísima».
«Todo ha ocurrido en pocas horas y me parece estar todavía en la final del cronómetro del equipo. Es un momento en el que se suceden muchos estados de ánimo, pero no he perdido el optimismo ni la sonrisa, y eso es lo que más me ha ayudado, además del cariño de la familia».
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