Feliciano López durante el partido. | Teresa Ayuga

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El tenista español Feliciano López se impuso este lunes al francés Dominic Thiem (7-6, 6-1) en la final del torneo de exhibición Toni Nadal Trophy, disputado en las instalaciones del Mallorca Open y que contó también con la presencia de Carlos Moyá, que volvió a empuñar la raqueta.

El toledano logró la victoria sobre la hierba mallorquina en una jornada en la que los tres tenistas dejaron muestras de su calidad, para deleite del público asistente. La variedad de golpes y los bonitos intercambios reinaron en una jornada en la que Moyá se mostró muy emocionado por jugar en su «casa», algo que no pudo hacer en muchas ocasiones durante su carrera, que finalizó en 2010.

«Estoy muy feliz de haber jugado en casa, donde durante mi carrera no tuve muchas oportunidades de hacerlo», declaró. «Estaba toda mi familia en la grada. Mis hijos me han visto jugar, lo que me ha hecho mucha ilusión», añadió el mallorquín. «Las condiciones han sido perfectas y estoy muy agradecido a los organizadores por haberme dado esta oportunidad», finalizó.

Precisamente uno de los organizadores, Toni Nadal, no quiso perder la oportunidad de alabar a un Feliciano que ha conseguido buenos resultados y «se ha adaptado» bien «a la hierba». «Después de Rafael, Feliciano ha sido el segundo jugador de esta generación que mejor se ha adaptado a la hierba», concluyó.