Proponen a Mateu Cañellas y a Isabel Aguilar para el Cornelius Atticus 2019

La Conselleria de Asuntos Sociales y Deportes propondrá al Consell de Govern que ratifique los dos candidatos propuestos por el jurado del galardón que constituye la máxima distinción que otorga la comunidad en el mundo del deporte, en reconocimiento a la trayectoria deportiva en diferentes ámbitos.

Mateu Cañellas dedicó su vida al deporte y fue deportista, técnico y dirigente. Fue campeón de Baleares de atletismo en 800, 1.500 y 3.000 metros, de 10 kilómetros y de Cross, así como campeón de España de 3.000 obstáculos en 1974.

Volvió al atletismo como veterano en el maratón de Nueva York en los noventa y consiguió diez títulos de Baleares de su categoría entre 1996 y 2006, además de disputar numerosas carreras populares.

Presidente honorífico de la Federación Balear de Tiro con Honda por su pasión y labor de divulgación hacia este deporte, también fue cronista, organizador de competiciones y divulgador del deporte del atletismo

Ha sido propuesto para la distinción por el comité de jueces de atletismo.
Isabel Aguilar destaca por su trayectoria como deportista en la natación, el atletismo, el baloncesto y la petanca, y como entrenadora de varias disciplinas y del baloncesto inclusivo.

Propuesta por el Ayuntamiento de Manacor, Aguilar la sido promotora de varios cursos de formación sobre deporte y discapacidad y formadora, así como entrenadora y vicepresidenta del Club Deportivo Aproscom, y ha recibido numerosos reconocimientos a lo largo de su trayectoria.

Esta convocatoria de Cornelius Atticus es la tercera en la que hay una doble categoría de ganador del galardón masculina y femenina.

La distinción Cornelius Atticus reconoce los méritos de las personas que han dedicado su vida al deporte en Baleares. Se otorga desde el año 1996 y que desde 2017 también se establece una distinción femenina.

Lleva este nombre por el primer deportista que se conoce en la historia de las islas, un pancracista (una disciplina de lucha cuerpo a cuerpo) del siglo III de quien se encontró la lápida con un poema laudatorio inscrito, durante las excavaciones a la ciudad romana de Pollentia (Alcúdia, Mallorca) en 1933.