La sentencia explica que en enero de 2019, el por entonces gerente de la Fundació presentó una solicitud a la Dirección General de Presupuestos para «la autorización de modificación de la RLT, consistente entre otras cosas en la adecuación retributiva de dos puestos de trabajo», uno de los cuales era el de Abrines, ubicado en el organigrama como Enlace Técnico -actualmente Técnico en Promoción y Patrocinio-. Él mismo emitió un informe en julio de 2018, siendo gerente, proponiendo que su puesto de Enlace Técnico pasara a denominarse Cap de Negociat de Promoció i Patrocini «añadiendo los complementos de responsabilidad y dificultad técnica», que supondrían un sustancial incremento de sueldo.
En febrero de 2019, el director general de Presupuestos emitió un informe de los diversos aportados en el que, en referencia a los incrementos retibutivos de la plaza de Enlace Técnico, «no se analiza al haber presentado el gerente escrito solicitando la suspensión de la resolución del expediente con respecto a dicha plaza al ser él mismo el titular de la misma», e informando a la vez favorablemente de otra que se había tramitado a la par.
Las reclamaciones presentadas por Abrines se dirigen desde el principio a la creación de un puesto de trabajo con el contenido y retribución que entiende que le corresponden por las funciones que realiza, no acreditando la sentencia «que las tareas del actor (Abrines) sean continuas, habituales y abarquen la totalidad o sus contenidos esenciales», apoyándose en el testimonio de personal de la Fundació, que afirmó en sede judicial que «no realizaba sus mismas funciones (ambos son facultativos superiores)» y que su responsable directo era uno de los citados a declarar», lo que condujo a la desestimación de la demanada en cuanto a la realización de funciones de superior categoría. Esos interrogatorios revelaron que Abrines asumió algunas funciones de técnicos superiores tras su salida, pero «ello no implica un aumento de la responsabilidad ni de la dificultad técnica, que no se han acreditado». Y, en referencia al importe solicitado, «se desconoce el fundamento del mismo, que no coincide ni con lo establecido en convenio, ni tan siquiera con los complementos que figuran en la propuesta de modificación de la RLT».
Esta situación, y la nueva ubicación de Abrines en la Fundació per a l'Esport Balear, han generado enorme malestar entre una parte importante de su personal. Incluso los representantes legales de los trabajadores fiscalizarán estos movimientos, con el fin de evitar que puedan llevar consigo un incremento salarial y algunos se niegan a mantener reuniones con el nuevo gerente en presencia de Abrines.
Incluso este asunto, focalizado en la figura del exgerente, podría llegar en breve al Parlament de les Illes Balears, ya que desde la oposición se prepara incluso una posible pregunta al respecto con el fin de aclarar una situación que ha generado incomodidad en la Fundació per a l'Esport Balear y sorpresa al conocer la noticia. Algo que se agrava toda vez que los responsables de la Direcció General y la Fundació eran sabedores de esta situación particular.
Durante su etapa en la gerencia, Abrines protagonizó un episodio que generó enorme revuelo, al intentar implantar una aplicación en los teléfonos móviles de los técnicos de la Fundació con el fin de controlar sus horarios de entrada y salida. La herramienta, que incluía un sistema de geolocalización de los titulares de los terminales, no pasó de una fase de pruebas, y dada la controversia y polémica generada y los errores que mostró, fue retirada.
7 comentarios
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Nada nuevo bajo el sol. Tengo un familiar que fue gerente de lo que es ahora Fundación para el Deporte Balear (antes EBE) y me confirmó que hay entrenadores que cobraban más que él y que el director general de esports. Y otros que estaban en la oficina sin oficio ni beneficio pero cobrando tambíen buenos sueldos sin ningún tipo de productividad. Sueldos públicos que no se justifican ni por su titulación ni por dificultad técnica, sino que personajes como Abrines (Qué segón me comentaron no tiene titulación universitaria alguna ni titulación deportiva del máximo nivel) en una Fundación como esta, de marcado carácter técnico para trabajar en ella, se aprovechan del enchufismo del partido político de turno, y la permanente dejadez de los autoridades o funcionarios que deberían supervisar y podríamos añadir (en la mayoría de los casos) la poca preparación técnica y profesional contrastada de los políticos que han gestionado, gestionan y gestionarán el deporte balear. Siguiendo con este "paraíso ´no fiscalizado" de la Fundación: ¿Cual es el porcentaje del presupuesto de la Fundación destinado a pagar las nóminas de personal técnicos y no técnico? ¿De verdad que no hay ningún tipo de organismo externo o interno de las consellerías que supervisen y auditen, como prevención o ya la prevaricación va en nuestros genes?. Vergonya cavallers!
Tendrían que revisar los sueldos de los presidentes/as de las Federaciones, asociaciones, fundaciones. No se quedan cortos, menuda vergüenza y luego salen en prensa por su gran labor.
Pues lo mismo que hacen todos los políticos constantemente, poniéndose los suelos y prebendas que ellos quieren bajo el argumento de que ellos son la Ley y no hay nadie por encima de ellos para aprobar sus aumentos, prebendas, subvenciones a los gintonics o menús en el congreso etc
Todas las fundaciones del Govern Balear e Institutos o Empresas públicas, suelen tener un gerente. Este.señor coloca a los suyos sin examen ninguno....a dedo. Primos, amigos,etc. Tenemos el Ibassal, Fundación para la drogadición, del Sport....Palma Arena...
angelt3020Alerta amb el que dius que és possible que surtis escaldat...
¿Partido político?...., porque aquí parece que solamente existen los de VOX.
Situaciones típicas de "empleados públicos" de Fundaciones, Institutos de todo color y temática y demás Empresas Públicas (Admón. Instrumental) que ni han pasado ni un solo examen de entrada en su vida, se han agarrado de todas formas posibles a su "cortijo" quasiparticular y se lo han creído. Hasta que son pillados, como es el caso. Y lo, seguramente, hay.