El Palau d’Esports de Son Moix registró un gran ambiente para ver el duelo ante el Barcelona.

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Para ganar al Barça de fútbol sala hace falta realizar el partido perfecto en defensa, estar acertados en ataque y contar con la dosis suficiente de suerte. Todos esos ingredientes se dieron este martes tarde en el pabellón de Son Moix para que el Mallorca Palma Futsal lograra un gran triunfo ante el considerado mejor equipo del mundo. Una victoria que llena de moral a los pupilos de Antonio Vadillo a una semana de que se inicie en el mismo escenario la Elite Round de la Champions League.

El Mallorca Palma Futsal comenzó el partido sometiendo al Barça a una gran presión. Tayebi ya puso a prueba a Feixas a las primeras de cambio. El encuentro tenía un gran ritmo, con una presión alta de ambos conjuntos buscando ataques rápidos, aunque también recurriendo a disparos de media distancia. Marlon pudo adelantar a los locales en un contraataque pero Feixas le sacó el balón ‘in extremis' y a continuación el portero visitante también frustró la gran combinación al primer toque entre Rivillos y Eloy Rojas.

Peligro

El único debe en el equipo pistacho eran las faltas cometidas. A los ocho minutos del encuentro ya había realizado cinco infracciones y se encontraba al borde del doble penalti. Eso ante un equipo de la calidad del Barça es sinónimo de graves problemas, pero el Mallorca Palma Futsal no solo logró seguir con su rigor defensivo sin cometer la sexta falta, sino que logró derribar al Barça en dos ocasiones. La primera de ellas fue tras una pérdida de balón del portero blaugrana que había iniciado la jugada de ataque de su equipo. Su pase fue interceptado por Cleber quien con una preciosa vaselina inauguraba el marcador.

Tayebi pudo aumentar la ventaja y Eloy Rojas tuvo también una doble oportunidad de batir a Feixas, pero fue Mancuso quien a la media vuelta agarró un chut que sorprendió a Feixas a falta de tres minutos para el fin del primer periodo. El Barça cometió su quinta falta a uno 1:13 del descanso, pero ninguno de los equipos llegó a la sexta infracción en lo que quedaba de primer tiempo. Tras la reanudación, desde el primer segundo se vio que el Barça iba a vender cara la derrota. En los primeros diez segundos Adolfo estuvo a punto de batir a Muller, algo que consiguió antes de que se cumpliera el primer minuto de la reanudación. Tocaba sufrir y el Barça comenzó a dominar de una forma apabullante, pero el conjunto local logró poco a poco igualar las fuerzas.

Entonces llegó el espectáculo de Tayebi, que destapó el tarro de las esencias con varias acciones de una calidad exquisita. Pero fue el Barça, merced a un doble penalti ejecutado por Coelho quien puso la igualdad en el electrónico a falta de seis minutos. Tayebi seguía a lo suyo y en la enésima acción individual que acabó en córner, éste fue lanzado por Chaghinha y el iraní, de fuerte derechazo, volvía a dar ventaja a los verdes. Los últimos minutos supusieron un asedio blaugrana con dos largueros incluidos, pero fue el propio Chaghinha quien sentenció el choque en el último instante.