Claassen vuelve a la carga

Las misivas tratan de diferentes cuestiones, desde la impugnación de las actas hasta su ausencia en la reunión del consejo celebrado ayer, en la que pidió intervenir telefónicamente, pero no obtuvo ninguna respuesta. Asimismo, el accionista alemán expone cinco cuestiones para incluir en el orden del día de la próxima reunión del órgano de gobierno de la SAD balear.

En la primera carta, dirigida al presidente Jaume Cladera con copia al resto de consejeros, solicitó el aplazamiento de la reunión celebrada ayer como «ha sucedido en otras ocasiones cuando uno de los accionistas no podía asistir». También se ofreció «intervenir mediante conferencia telefónica». Obviamente, no le hicieron caso porque la reunión se celebró.

No obstante, considera «escandaloso» que se someta a aprobación «unas actas sobre reuniones celebradas hace meses y ahora se presenten a aprobación tras mi requerimiento notarial».

Claassen manifiesta su oposición a que «sean aprobadas» al encontrar algunas irregularidades. De hecho, en otra de las cartas, informa sobre la impugnación de actas del consejo de administración.

«No acepto las actas levantadas por Miquel Coca por cuanto no reflejan la realidad de lo allí acontecido. Por ello, me reservo las acciones legales que me correspondan en defensa de mis intereses», afirmó el accionista germano.

En el tercer documento remitido a los consejeros, Utz Claassen ya ha puesto sobre la mesa los temas que quiere incluir en la próxima reunión del consejo. El empresario alemán apunta directamente al director deportivo, Llorenç Serra Ferrer, para que le aclare algunas cuestiones.

Los dos brasileños

La primera de ellas afecta a los casos de Ratinho y Joao Victor: «El club abonó 350.000 euros a dos empresas suizas por la contratación de dos jugadores que han negado públicamente tener cualquier tipo de relación con estas sociedades. Quiero que se incluya como un punto en el próximo orden del día», indica Claassen.

El segundo tema capital para el consejero alemán también va dirigido al pobler . «Escuché que el director deportivo mandó su hijo a París en busca de información sobre los señores Alemany y Terrassa. Ruego que Serra Ferrer aclare este asunto». Utz Claassen, en su tercer punto, se dirige a Biel Cerdà para que le aclare si es cierto que «solicitó a uno de sus hombres de confianza que le ayudara en la búsqueda de posibles 'trapos sucios' del consejero alemán», refiriéndose a él.

También quiere preguntar, en la próxima reunión, si es cierto que dos representantes de la entidad «acudieron borrachos» a un acto oficial. Finalmente, quiere que se entregue la documentación referida a «la impugnación del Convenio de Acreedores». Utz Claassen no se rinde. Más bien todo lo contrario.