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En plena cuenta atrás hacia el inicio de la Liga (sábado, 23:00 horas, Son Moix) el Mallorca mantiene varios frentes abiertos tanto en el césped como en los despachos. Joaquín Caparrós mantiene la duda de saber si podrá contar o no con José Carlos Nunes, el central portugués, que se lesionó en la recta final de pretemporada y que ahora trabaja para llegar ante el Espanyol. Ayer entrenó con el grupo y puede recibir el alta médica en breve.

Mientras Caparrós está a lo suyo, Serra Ferrer continúa pendiente del teleféfono tratando de cerrar varias de las gestiones que llevan abiertas varias semanas con el fin de concretar el fichaje de dos centrales y un delantero. Es evidente que tarde o temprano terminarán llegando estos refuerzos, entre otros motivos porque es también evidente que Caparrós necesita reforzar un armanzón que ha quedado muy mermado, sobre todo detrás, con la marcha de Ramis y Chico y la lesión ahora de Nunes. Pero aún con el portugués al cien por cien es imprescindible reforzar el centro de la zaga con dos jugadores que ofrezcan máximas garantías y puedan hacerlo lo más rápidamente posible. Serra trabaja también en la contratación de un delantero porque de momento su entrenador no está plenamente convencido con lo que tiene. El vicepresidente defiende el carácter ofensivo de jugadores como Pereira, Alejandro Alfaro, el poder de Hemed, Víctor, Arizmendi... pero Caparrós quiere un referente claro, un nueve fijo y Zigic es por el momento el que más llena al entrenador y el que más cerca está del Mallorca en estos momentos. De hecho se le espera en la Isla en las próximas horas.

El mercado es caro, no ofrece excesivas facilidades en ningún sentido, ni a la hora de fichar defensas ni mucho menos delanteros, pero lo cierto es que las urgencias van sucediéndose a medida que pasan los días y el Mallorca llega a los días previos al debú ligero sin tres de los jugadores llamados a ser titulares con vistas a la próxima temporada.

Por este motivo, porque Joaquín Caparrós tiene en estos momentos una plantilla reducidísima en defensas, se ve en la necesidad de improvisar, como ya hizo en el Ciutat de Palma, y una de las opciones que baraja es la de situar a Bigas junto a Joao Víctor en el centro de la zaga. Nunes podría salir a solventar parte del problema si finalmente se recupera a tiempo, pero inclusó así sería difícil que el portugués pudiera estar al cien por cien. Todo junto hace que el entrenador, pese a que es consciente de las dificultades que se presentan a la hora de fichar, no puede ocultar su inquietud por ver cómo van pasando los días y, ante el Espanyol pasado mañana, deberá alinear a un once de circunstancias.