Miquel Coca. | Joan Torres

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Utz Claassen fue el gran ausente de la junta general de accionistas que se celebró ayer en Son Moix... Pero sólo físicamente. El alemán estuvo representado por su esposa Anett y también por el abogado Mariano Boquera. A través de ellos, Claassen reclamó al presidente en funciones, Serra Ferrer, detalles sobre toda una serie de pagos que se han realizado desde el club y que deben ser aclarados, según el criterio del accionista germano. En un plazo máximo de siete días debería recibir respuestas.

Utz Claassen pidió un informe detallado de la facturación de sociedades participadas por miembro del consejo de administración o familiares, en clara alusión a Jaume Serra, representante de jugadores e hijo del director deportivo.

Eso sí, el principal caballo de batalla del alemán tiene nombre propio. Claassen quiere ver las facturas que emitió el bufete de Miquel Coca al Mallorca durante el pasado ejercicio. Según datos a los que ha tenido acceso este periódico, del 20 de febrero de 2011 al 20 de enero de 2012, Bufete Coca y Asociados, facturó 229.285 euros a la SAD balear. Ahora Claassen precisa ampliar la información.

De la misma forma el consejero alemán ha pedido también conocer la facturación que gira al club la empresa externa de comunicación contratada por el Real Mallorca y que se encarga de la relación con los medios y sobre todo de organizar y dirigir las actividades institucionales.

Al hilo de esta solicitud, también Utz Claassen pidió a través de su abogado que el presidente en funciones, Serra Ferrer, le detalle si han existido y siguen existiendo pagos a periodistas, bien sea de forma directa o a través de sociedades que los propios comunicadores puedan tener creadas. Claassen sospecha que este tipo de pagos pueden haberse realizado durante estas últimas temporadas y el alemán quiere confirmar si esto es así porque entiende que en una situación de concurso de acreedores como en la que estaba implicado el club hasta hace poco, este tipo de situaciones no debían haberse producido. Por último también el teutón ha pedido detalles de los pagos de comisiones a representantes de futbolistas. A toda la información reclamada por los abogados de Claassen debe darse una respuesta en un plazo que no supere los siete días. Los asuntos económicos fueron el núcleo de una junta de debía ser de trámite, pero a la que Claassen puso bastante pimienta.