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Junto a la rampa de salida y ante un auditorio hambriento de estímulos y buenas noticias, el Mallorca encajó anoche el primer bofetón serio de su caminata estival. Partido en dos y cuesta abajo, el equipo de José Luis Oltra difuminó su gran primer tiempo sepultando dos goles de ventaja y acabó concediéndole su trofeo al Recreativo en una ajustada tanda de penaltis. Al final, mientras los onubenses vengaban a aquella generación de héroes que cayó hace una década en la final de Elche, el mallorquinismo empezaba a entender que el viaje que iniciará la semana que viene en Sabadell será cualquier cosa menos plácido (2-2).


Lo cierto es que el Mallorca que destapó la fiesta del Ciutat de Palma nada tuvo que ver con el que acabó manchando su propia función en la última media hora de partido. Con un traje muy similar al que lucirá en la Nova Creu Alta y contra un Recre despojado de algunos de sus argumentos más pesados, el primer tiempo resultó un monólogo en rojinegro. Recostado a la espalda de un Thomas descomunal, el cuadro rojillo se permitió el lujo de abusar de su invitado en el tramo inicial, disputado casi en exclusiva en terreno andaluz. Al futbolista ghanés, incorporado este mismo verano a las filas de Son Moix cedido por el Atlético, le alcanzó con unos de minutos de exhibición para ganarse a la grada y establecer una nueva jerarquía que puede ser fundamental durante los próximos meses. Con él dirigiendo el tráfico, el motor mallorquinista tardó muy poco en carburar y en comenzar a producir fútbol.

Dominio total

Ya en ese tramo inicial pudo el Mallorca marcar el territorio. Lo impidió Aki, que pese a su reciclada voluntad de ganarse el puesto no acertó a rematar a gol ninguna de las ocasiones que se le aparecieron. Tampoco importaba. El equipo era muy superior y el gol, que se estaba cocinando a fuego lento, parecía cuestión de tiempo.
Fue el propio Thomas el que prendió la mecha que hizo estallar el marcador. Una de sus recuperaciones encontró a Víctor tumbado a una banda y el de Algaida asistió a Alfaro, que sorprendió a contrapié a Cabrero con un remate mordido. Buen gol. Buenas sensaciones.


El Recreativo intentó levantarse y justo después del tanto de Alfaro acarició el empate por medio de Alexander Szymanowki, su jugador más desequilibrante. Primero el palo y después Miño evitaron que la batalla llegara nivelada al intermedio.

La segunda mitad trajo de nuevo consigo al Mallorca pujante del primer acto y la noche parecía encaminada hacia la sexta victoria veraniega. Sobre todo después de que Víctor agrandara la zanja. Sin embargo, fue ahí donde empezó a gestarse el derrumbe mallorquinista...

Con el 2-0 en la mochila y los banquillos en movimiento, el Mallorca se destensó y el Recreativo se puso serio. Además de darle un color sorprendente a su pizarra, Sergi Barjuán volcó toda la munición sobre el tapete y el Decano llegó a tiempo a la cita. El descaro y la verticalidad de Ezequiel Calvente, unidos a la electricidad de Alexander, forzaron un empate con el que casi nadie contaba. El argentino goleó en dos ocasiones y aunque la igualada llegó prácticamente sobre la bocina, Miño ya la había aplazado poco antes con una intervención extraordinaria a remate de Fernando Vega. Tocaba jugarse el trofeo y su consiguiente inyección de moral desde el punto de penalti. Ahí, los francotiradores del Recre no perdonaron y fue la osadía de Abdón, que arriesgó con la fórmula Panenka, la que decidió el último ensayo general antes del gran viaje. El aviso está sobre la mesa.

Ficha técnica:

RCD Mallorca: Miño, Ximo (Sastre min.85), Thomas (Javi Márquez min.85), Pereira (Gerard Moreno min.61), Nunes (Geromel min.85), Bigas (Charlie Took min.85), Víctor (Abdón min.61), Martí, Agus (Kevin min.61), Alfaro (Álex Moreno min.85) y Aki (Company min.85).

Recreativo de Huelva: Cabrero, Zamora, Montoro, Linares, Szymanowski, Dimas, Cifu, Arana, Ruyman, Álvaro y Morcillo.

Goles: Alfaro (min.28) 1-0; Víctor (min.48) 2-0; Jorge (min.80) 2-1; Szymanowski (min.90) 2-2. Victoria en los penaltis por 4 a 5.

Árbitro: El colegiado Pedro Sureda amonestó con tarjeta amarilla a Montoro (min.15) ya Arana (min.57) por parte del equipo rival.