PALMA - REAL MALLORCA - RUEDA DE PRENSA DE LLORENÇ SERRA FERRER . | Joan Torres

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En otra extensa cumbre, marcada esta vez por la ausencia del máximo accionista, Llorenç Serra Ferrer, el consejo de administración debatió acerca de la situación económica del Mallorca, que podría enfrentarse a problemas de liquidez a corto y medio plazo. Y así lo volvió a recordar a su salida el propio Utz Claassen pese a que, minutos antes, el presidente, Gabriel Cerdà, negó ese extremo y aseguró que la entidad no tendría dificultades en ese sentido si se cumplía con el presupuesto.

«Va a ser necesario hacer algo para solucionar los problemas que tenemos», explicaba el accionista y consejero alemán al ser cuestionado acerca de una posible ampliación de capital. Además, advertía sobre los puntos más calientes del cónclave celebrado en las entrañas de Son Moix y dejaba entrever que el propio Cerdà se había negado a aprobar los pagos ordinarios correspondientes al mes de marzo.

«Quiero desvincularme de muchas de las decisiones que se han tomado por mayoría contra mi voto y consejo», proseguía Claassen. «Me siento comprometido a contribuir con mis piezas al mosaico en varios temas porque ahora podríamos enfrentarnos a una situación en la cual los pagos ordinarios del mes de marzo fueran rechazados y siendo así no sé qué pasaría con el club. En este sentido la reunión ha sido un sufrimiento, pero había que favorecer un cierto funcionamiento del club y por eso ahora se podrán encarar esos pagos aunque alguien se ha negado a aprobarlos. Se han votado cosas que no puedo entender y si alguien vota en contra de asumir esos pagos me pregunto: ¿qué quiere esa persona? Porque si el Mallorca no cumple con sus obligaciones legales no sé dónde acabaremos», sentenciaba.

Antes, Cerdà destacó que «el club hará lo imposible para cumplir el presupuesto y no habrá deuda. Dejé la gestión directa del club el 31 de diciembre y los estados contables eran correctos y los estados intermedios auditados están perfectos. Si es así, no debería faltar dinero. Hubo unas personas que asumieron el control del barco y al ver que no podían manejarlo se han lanzado de él».