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Javier Olaizola se mostró satisfecho por la victoria ante Las Palmas, apunta a una nueva alegría este sábado frente al Córdoba y señala el orden defensivo, el compromiso y la presión en el lugar que correspondía para poder superar al rival. «Os veía anunciando esta semana y media que he tenido la oportunidad de coger al equipo que estaba convencido de que ganaríamos. Lo estaba desde el día del Girona y se ha corroborado con una victoria ante Las Palmas muy importante», manifestó el entrenador.

Respecto al encuentro en Córdoba, el técnico evitó entrar en excesivas cábalas, al menos ayer tras el partido ante Las Palmas. «No hemos hecho cuentas de lo que hay que hacer allí mirando la clasificación. Vamos a empezar la semana a partir de lunes con un trabajo fuerte y esperando ganar. El equipo tiene mucha calidad, es un equipo importante y vamos a preparar el partido lo mejor posible para intentar de ganar», declaró el vasco.

Olaizola, añadió sentirse «orgulloso» por el trabajo de la plantilla. «Estoy orgulloso de los jugadores. Cuando me presentaron el reto a falta de tres jornadas ya os dije que si me había atrevido a coger el mando es porque creía enormemente en esta plantilla. Les he tratado de quitar de la cabeza que la presión tienen que tenerle otros equipos en lugar de nosotros», matizó.

Respecto al gran ambiente de la grada, Olaizola dio las gracias a la afición por su comportamiento. «De la afición ya sabéis lo que pienso. Es importantísima. Les hemos pedido que vengan y han venido, que animaran hasta el minuto noventa sin tener en cuenta cosas raras y lo ha hecho. Es de las mejores de España y es muy importante para el equipo. Cuando le pides que te ayuden lo hacen de corazón», recordó el entrenador del Mallorca.

Futbolísticamente el vasco habló de «orden» y «presión». «Jugamos muy ordenados, haciendo las presiones donde habíamos ordenado y de manera intensa y eso ha impedido el fútbol combinativo de uno de los equipos que mejor juegan de la categoría. Se ha comportado muy bien el equipo defensivamente. Al final hemos echado el orden un poco más atrás y es normal que un equipo de la calidad del rival te apriete», manifestó.

Personalmente, destacó que su gran sueño se había completado. «Mi sueño se está cumpliendo. El sueño de mi vida, siendo futbolísta de este equipo y ahora me dan la oportunidad de ser entrenador. Si nos mantenemos me voy a podir morir tranquilo porque mi felicidad estará colmada», declaró. A modo de curiosidad, ayer el entrenador dirigió con traje. Lo hizo por un motivo especial. «Lo del traje es que mi hijo mayor me dijo que tenía una pinta de macarra que madre mía con el chándal. Todos van con chándal y tu con traje, me dijo. Así que ha sido más por él que por otra cosa», declaró.

Sobre el esfuerzo de Nsue y Nunes y el compromiso del grupo, Olaizola dijo: «Es un detalle del compromiso que tienen los jugadores. Nunes no podía y se ha llevado un castañazo y lo veía mareado y ha vuelto a entrar. Emilio le han dado un golpe en el exterior y en el descanso me ha dicho que sale y que se va a dejar la vida, ha hecho el gol y no ha podido más. Me gustaría resaltar el compromiso de este equipo, los once, los tres cambios, los del banquillo y los que se han quedado sin convocar. Hay un compromiso y un ambiente genial en este equipo», dijo.