Gabriel Cerdà, presidente del Mallorca, a su llegada a un consejo de administración en Son Moix, el pasado mes de enero. | Jaume Morey

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Gabriel Cerdà atiza a Serra Ferrer y le reprocha que esté dilatando la venta de su paquete accionarial acusándole además de poder estar orquestando una «venta ficticia» de sus títulos para de esta forma seguir vinculado al club balear pese a ocupar un cargo en Real Betis. En un comunicado hecho público ayer noche, el presidente del Real Mallorca habla abiertamente de la venta de las acciones, deja entrever que Serra tiene prisa para cerrar la operación y de esta forma fichar por el club verdiblanco y declara que la oferta de Dudu Aouate no implica la participación de ningún accionista de la talla de Abramovich.

DUDU AOUATE
«Me ha hecho una oferta económica de compra»

El presidente admite que existe un interés real por Aouate, pero que esta oferta no ha venido acompañada de garantías. «Dudu Aouate me ha hecho una oferta (y no Abramovich, como desmintió el propio Dudu) económica de compra de mis acciones, sin especificar los requisitos de garantía y solvencia», puntualiza Cerdà en su comunicado.

SERRA FERRER
«La oferta de compra no puede llevarse a cabo»

Cerdà admite el interés de Aouate, pero a continuación señala a Serra Ferrer porque el pacto de sindicación que une al presidente y al vicepresidente obliga al de sa Pobla a tener que mover ficha. Así lo explica el presidente del Mallorca. «Dicha oferta no se puede llevar a cabo porque Lorenzo Serra no le ha firmado el documento que le autoriza para poder comprar mis acciones, al estar sindicadas».

NADA DE ULTIMÁTUM
«Aouate necesita el documento de Serra, cosa que no tiene»

También Biel Cerdà quiso dejar claro que el portero no le ha dado ningún «ultimátum». «Dudu Aouate no me ha comunicado ningún ultimátum, porque para poder comprar mis acciones (no depende de mí al estar sindicadas) necesita el documento de Lorenzo Serra Ferrer, cosa que no tiene todavía, en el que le autorice a comprar mis acciones», apunta Cerdà. Cabe recordar que la sindicación entre Serra Ferrer y Biel Cerdà especifica toda una serie de obligaciones y a su vez prohibiciones, que en caso de no cumplirse, el accionista sindicado que incurra en un imcumplimiento se expone a duras sanciones económicas. Por ejemplo, la sindicación indica en su punto 7 lo siguiente: «Los socios no podrán de ningún modo, ceder fiduciariamente, otorgar prenda sobre las acciones o realizar cualquier otro acto que pueda privar, afectar o limitar los derechos de los otros socios previstos en el acuerdo». En consecuencia, cualquier movimiento que se lleve a cabo por parte de un accionista debe ser comunicado al otro y en este caso, para que Aoute negocie la compra de las acciones, forzosamente necesita del OK de Biel Cerdà, que es clave en esta operación.

PRESIONES
«Se deben al interés de Serra Ferrer en irse al Betis»

Cerdà entiende que las «presiones» que ejerce el entorno de Serra tienen un fin claro: «Estas presiones se deben al interés que tiene en abandonar [Serra] el Mallorca para poder ir al Real Betis, ya que si no vende sus acciones no puede ocupar ningún cargo directivo en el Real Betis». «Serra Ferrer –prosigue el comunicado– tampoco ha vendido sus acciones a Dudu Aouate, porque no puede: Primero porque tiene una sindicación hasta el día 1 de julio con Pedro Terrasa y segundo porque tiene una sindicación conmigo», indica el escrito de Gabriel Cerdà.

CONDICIÓN
«Podría entenderse que quiere hacer una venta ficticia»

Concluye Gabriel Cerdà que se puede estar produciendo una ilegal operación de vena ficticia. «Las informaciones que llegan de portavoces allegados a Lorenzo Serra indican que no va a percibir dinero en la venta de sus acciones por lo que se podría entender que quiere hacer una venta ficticia para seguir vinculado al Real Mallorca», asegura Cerdà en su escrito.