palma deportes aouate presentacion foto joan torres

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Miquel Alzamora26/08/14 0:00
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Ernst & Young, la consultora que ha llevado a cabo el informe de tesorería del Real Mallorca, ha concluido su trabajo y los resultados no pueden ser más pesimistas. A corto plazo, es decir, ya para el mes de septiembre, faltan 1,7 millones para afrontar los gastos más corrientes y a la vez improrrogable. Seguirá debiendo un millón a varios proveedores, pero esa cantidad hace ya tiempo que se va aplazando mes a mes y por el momento va a seguir estando plazada. El dosier que ha entregado esta consultora no es una auditoría y por lo tanto no extrae ninguna conclusión, aunque eso sí, es concreta a la hora de analizar con frialdad los números de la SAD Balear. Cifra las pérdidas del pasasado curso en 4 millones y recuerda que el club se gastó 25 millones de euros la pasada temporada y eso que estuvo al borde del descenso a Segunda B.

El futuro no es muy alentador porque a finales de esta temporada, en junio de 2015, las pérdidas se cifran entre 4 y 5 millones, tal y como ha informado este periódico durante estas últimas semanas. De hecho, el resumen de esta consultora viene a confirmar punto por punto las informaciones que ha ido avanzando Ultima Hora respecto al pésimo estado de las cuentas del club.

Como se ha apuntado anteriormente no especifica conclusiones, pero la frialdad de los números y la necesidad de inyectar liquidez urgente hace imprescindible afrontar una ampliación de capital de forma urgente.

La gravedad aumenta si se valora que los activos financieros del club han bajado enormemente. Uno de esos activos puede ser el estadio de Son Moix, cuyo rendimiento económico está muy por debajo de lo previsto, ello obligará a que la ampliación que deba llevarse a cabo sea muy superior a lo inicialmente previsto.

En este escenario en el que el club puede entrar de forma inmediata en el colapso financiero restan dos posibles soluciones a corto plazo: de una parte la drástica redución del presupuesto en casi un cicuenta por ciento, lo que supondría dejar el club casi en situación de improvisación o la menos dramática y más efectiva y que pasa por inyectar capital a la sociedad a través de una ampliación. Así las cosas, con todos los números sobre la mesa, Aouate ya sabe la realidad económica del club y puede orquestar los mecanisos necesarios a través del grupo económico que le apoya para solucionar una crisis de impredecibles consecuencias.