Michael Pereira se lleva las manos a la cara durante un partido. | Miquel Àngel Llabrés

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Michael Pereira estará entre un mes y un mes y medio apartado de la rutina mallorquinista. El futbolista francés regresó este lunes a Palma tras pasar la noche del domingo en Soria acompañado de personal sanitario del club y pasó por el quirófano, donde fue intervenido por un especialista maxilofacial de la fractura del arco cigomático derecho que sufrió durante el partido ante el Numancia. El centrocampista deberá afrontar ahora un periodo de entre cuatro y seis semanas de baja por culpa de una lesión que le ha sorprendido en uno de sus mejores momentos de forma.

El partido de Los Pajaritos ha dejado una costosa factura en el vestuario del Mallorca, que además de seguir perdiendo potencia en su intento de ganar terreno en la clasificación se ha dejado a un futbolista de peso por el camino.

En Soria, con el sendero cuesta arriba y el equipo nadando contra la corriente, Pereira recibía un fuerte golpe en el rostro a la hora de pujar por un balón dividido y pese a jugar durante los minutos posteriores con el pómulo roto, los médicos no le dejaron volver al campo tras el descanso. Salomao ocupó su lugar en la banda y el futbolista galo se dirigía a un hospital de la capital soriana, donde se le detectó un «hundimiento del arco cigomático derecho, con fotofobia, pupilas arreactivas y cefalea». «Se identifican tres líneas de fractura en arco cigomático derecho con hundimiento del mismo sin evidencia de otras lesiones faciales», añadía el parte médico.