El Mallorca llega con todo a su encuentro con el colista. Javier Aguirre, incómodo con los bandazos que da el equipo, tiene a toda la plantilla a punto a excepción del central Dennis Hadzikadunic, que hasta ahora no ha pasado de figurante. El internacional bosnio, que ni siquiera ha debutado desde que llegó en enero, sale de un proceso gripal y es la única baja de un grupo que recupera a Copete para ensanchar las paredes de la defensa y en el que tampoco hay sancionados. Con la baraja casi al completo sobre la mesa, el técnico quiere volver a ponerlo todo en su sitio. Tapando algunos de los agujeros que han ido apareciendo atrás, mejorando la puntería en ataque y, por encima de todo, ganando para no descuidar una dinámica que desde principios de noviembre y con el Mundial de por medio se ha llevado por delante al Atlético, el Valladolid, el Celta, el Real Madrid y el Villarreal. En ese sentido, el mexicano parece haber encontrado en el armario el molde correcto. O, al menos, uno de los que mejor le funcionan para lo que busca.
En los dos últimos partidos solo ha realizado modificaciones en la terna de centrales, donde ha utilizado a cinco jugadores distintos. Junto a Antonio Raíllo, el único fijo en la zona durante el último mes, lo normal sería que volvieran a su lado Valjent y Copete, sus socios más habituales. En cualquier caso, Gio González ha rendido a un alto nivel cuando ha actuado en esa posición y Nastasic, pese a sus lagunas puntuales, también ha dejado picos muy altos en ciertos momentos.
Armadura aparte, Aguirre no ha cambiado un solo cromo en las dos últimas jornadas. Ha reforzado su apuesta por Galarreta como patrón en el centro del campo, con Dani Rodríguez muy cerca, Kang In Lee y Kadewere empujando y el Pirata Muriqi, que vuelve a tener el gatillo engrasado, cerrando la cremallera. Jugadores como Amath o Manu Morlanes, que parecían preparados para ir ganando sitio, tienen que seguir esperando turno para entrar en el once.
Además de reparar las fugas defensivas que se han ido detectando, originadas casi siempre en la salida de balón, el Mallorca intentará sortear la trampa del colista. Aunque en los dos últimos partidos frente a farolillos rojos ha suavizado los registros esquivando la derrota, el Mallorca acostumbra a curar a rivales enfermos y solo ha ganado a cinco de los 33 últimos clasificados con los que se ha cruzado desde el último cambio de siglo. Unos datos a los que el propio técnico le quitaba importancia este viernes, pero que volverán a sobrevolar el estadio cuando empiece el partido.
El Elche llega a Palma con un fuerte viento en contra. En las 23 jornadas anteriores solo ha ganado un partido y únicamente ha cosechado nueve puntos, unos números que lo han abandonado al final de la clasificación y han convertido en una quimera el acceso a la permanencia. A 15 puntos de la superficie, solo puede agotar las fuerzas que le quedan para luchar contra el destino.
Su entrenador, Pablo Machín, va a encontrarse en Mallorca con un problema añadido, ya que el Elche llega mutilado por las bajas. A las ausencias por problemas físicos de larga duración de Álex Collado, Pere Milla y John Chetauya se unen las sanciones de los centrales Enzo Roco y Lisandro Magallán y del centrocampista Pape Cheikh, los tres expulsados la jornada anterior ante el Betis.
5 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
🤡
Pues ya es hora de cambiar cromos cuando los actuales dan síntomas de flaqueza. Kang y Kadewere son dos mediocridades que piden a gritos ser sustituidos por Morlanes (la sala de máquinas es muy débil) y Abdón (el único delantero además de Muriqi con olfato de gol).
No hay sexto malo . . . . .o era quinto ????
Cuando se leen estas noticias queire decir que el Mallorca perderá
Pues las apuestas ahora mismo en algunas casas están 2.4:1 a favor del Elche.