Antonio Sánchez endulza el estreno de Larin

Sin dos de los fijos en la libreta del técnico por molestias físicas (Rajkovic y Valjent), el Mallorca empezaba apretando. Amath Ndiaye, eléctrico durante todo el primer tiempo, acariciaba el gol a los 56 segundos y se presentaba ante la defensa del Spezia, a la que iba a buscarle las cosquillas constantemente. El conjunto italiano contenía como podía las embestidas del cuadro isleño, con un centro del campo formado Mascarell, Morlanes y Dani Rodríguez. Un triángulo que, si no hay novedades entre las galerías el mercado, parece que será el que estrene la Liga la semana que viene.

Con el paso del tiempo el Mallorca afianzaba su superioridad y poco antes de la media hora encontraba su premio, aunque el remate final de Vedat Muriqi, en fuera de juego, no acabara plasmándose en el marcador. El propio Pirata, siete minutos antes del descanso, volvía a intentarlo con un remate ajustado que el polaco Bartlomiej Drqgowski repelía con una plástica estirada.

A la vuelta de los vestuarios y aún sin cambios, el Mallorca continuaba apretando y bordeando el primer tanto, aunque le faltaba echar el lazo en los metros finales. Ni siquiera Muriqi encontraba el camino y se topaba con Zoet en un mano a mano.

El partido se calentaba a ras de hierba, con los dos equipos elevando la intensidad, y en la grada con el calentamiento de Cyle Larin. El canadiense entraba en escena en el minuto 65 y su primera intervención era un pase de tacón a Muriqi que acababa de enchufar al público de Son Bibiloni.

Cuando más pólvora había en el tapete llegaba el gol del Spezia. Un despeje terrible de Baba dentro del área lo recogía Rachid Kouda para superar a Greif. El fallo crujía los cimientos de la defensa mallorquinista y otro error, en este caso de Toni Lato, estaba a punto de costar el segundo gol en contra a continuación.

El partido iba a arreglarlo Antonio Sánchez. Situado en la rampa de salida y ya sin el 10 a la espalda (salía al campo con el 18), el mallorquín aprovechaba muy bien los minutos que le ofrecía Aguirre y adornaba su trabajo con un gol al rematar dentro del área un centro raso de Javi Llabrés. El Mallorca cierra su fase de preparación con tres victorias y tres empates. Su próximo partido será el sábado que viene en Las Palmas y ya no habrá de munición de fogueo.