Nadal celebra «estar en semifinales por primera vez en la gira de tierra»

Tras sus dos derrotas consecutivas en los cuartos de final de los torneos de Montecarlo y Barcelona, Rafa Nadal explicó en rueda de prensa que afrontará la semifinal con la expectativa de jugar «un buen partido y estar en la final».

El número uno del mundo alcanzó la penúltima ronda del torneo madrileño gracias a su acierto en los «momentos importantes» y a la solidez de sus golpes desde el fondo de la pista. «Es el partido más completo que he hecho», celebró Nadal. «Todo el rato he jugado con la misma energía e intensidad. Durante el encuentro, el nivel ha ido incluso a más», analizó.

Tras doblegar previamente al argentino Juan Mónaco y al finlandés Jarkko Nieminen, dos rivales que le permiten tener ritmo a lo largo del choque, Rafa Nadal superó con nota el partido «más difícil» hasta ahora del torneo.

«Mi juego es bueno cuando pego la derecha», subrayó el mallorquín. «La derecha está funcionando bien otra vez. El revés no ha sido un problema durante la gira, ha sido bueno durante todos los partidos que he jugado, pero para jugar bien en tierra hay que jugar con la derecha», aseguró.

Recuperar la sensación de dominio del juego y los automatismos que le han llevado a erigirse en el mejor jugador sobre arcilla de la última década han permitido al ocho veces campeón del torneo de Roland Garros derribar la «barrera de los cuartos de final, que hacía dos semanas que no superaba», recordó.

«Me alegro y me siento satisfecho por ganar de la manera que he ganado. Poder volver a semifinales es una noticia muy positiva para mí, actualmente, y también de cara al futuro», confesó.

Dominador desde el fondo de la pista y preciso en los momentos decisivos del encuentro, Rafa Nadal recuperó «esas cosas» que le «han llevado a tener grandes resultados en tierra». «He dado un paso adelante importante», abundó.

Agradecido por el apoyo «brutal» de la afición en Madrid, el vigente campeón del torneo confía en aprovechar al máximo la energía que le da la gente. «Es difícil de encontrar en otros lugares», señaló.