Rafael Nadal inauguró la Clínica Mapfre de medicina del tenis en Madrid, centro especializado en la atención a tenistas profesionales y aficionados. Nadal estuvo presente en la puesta de largo de la clínica dirigida por el doctor Ángel Ruiz Cotorro. | Emilio Naranjo

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El tiempo se agota y el proyecto de Alcúdia como sede de la eliminatoria de cuartos de final del Grupo Mundial de la Copa Davis (6 a 8 de abril) pasa este martes un examen decisivo. El director general de la Real Federación Española de Tenis, Miguel Ángel Martín, visita la Isla para conocer los pormenores de la sede del Nord de Mallorca y calibrar el apoyo de las diferentes instituciones, clave para poder conseguir la designación.

A Alcúdia se han unido en las últimas horas otras aspirantes que pujan fuerte. En especial Valencia, que ofrece su plaza de toros. También Alicante y Granada han mostrado su interés ante un evento que tendría en la presencia del manacorí Rafael Nadal su principal aval y que el día 19 debe conocer su sede definitiva, después de ser estudiada por la directiva de la RFET, que siempre ha visto con buenos ojos la propuesta de Mallorca (que tiene al Palma Arena como alternativa), encabezada por el presidente de la Balear, Toni Ferragut, pero espera conocer el alcance del apoyo de las instituciones.

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Acoger la eliminatoria de Copa Davis podría tener un coste cercano al millón de euros. La RFET solicita un canon de 400 mil euros más IVA, a lo que se debe añadir el montaje de las pistas (ya se ha contactado con Andreu Puigserver), las gradas (aforo de diez mil localidades, sentados y con respaldo) y todas las instalaciones y servicios para atender las necesidades de jugadores, técnicos, federativos y medios de comunicación.

El Ajuntament de Alcúdia, con el respaldo del Govern (Espoerts y Turisme), Consell de Mallorca e, importante, el de la Agrupación Hotelera de Alcúdia, junto a la Federació de Tennis de les Illes Balears, encabeza una iniciativa que hoy afronta una reunión clave con la Federación Española, en la que se podrá saber si sigue adelante la iniciativa o queda aparcada. Alcúdia ofrece una planta hotelera preparada para albergar un evento de este calibre, tres posibles ubicaciones al nivel del mar y buen comunicadas y, por encima de todo, la ilusión de poder devolver a Mallorca al mapa de la Copa Davis catorce años después.