Durante una hora y media, ante decenas de aficionados y bajo un intenso calor, Nadal ha tomado contacto con la hierba ayudado por su entrenador, Carlos Moyá, y su fisio Rafa Maymó.
La rutina seguida en la pista por el número dos del mundo y reciente vencedor del torneo de Roland Garros fue muy exigente, con prolongados peloteos desde el fondo de la pista, golpes de derecha, de revés y saques.
Moyá le exigió a fondo, y dejó constancia de la variedad de recursos que le llevaron a ser el número uno durante dos semanas de marzo en 1999.
Nadal solo se permitió un respiro durante la intensa sesión de entrenamiento y lo hizo para responder de forma breve a una llamada a su teléfono móvil.
Al finalizar la práctica el tenista mallorquín firmó autógrafos y se fotografió con varias de los asistentes a la segunda jornada del Mallorca Open, que se disputa en el Club de Tenis de Santa Ponça, en la localidad mallorquina de Calviá, y cuyo director es su tío y ex entrenador Toni Nadal.
Miembros de la organización del torneo informaron que Nadal tiene previsto ejercitarse durante toda la semana, que coincidirá con el desarrollo de los partidos del Mallorca Open.
El sábado, añadieron, comparecerá en rueda de prensa para explicar sus sensaciones en los días previos a Wimbledon.
Considerado uno de los mejores jugadores de tenis de la historia, Nadal ha ganado 17 Grand Slam, dos de ellos en Londres (2008 y 2010), en sendas finales ante el suizo Roger Federer, que el pasado sábado le arrebató el número uno, y el checo Tomas Berdych.
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