Imagen de Roger Federer durante uno de sus últimos partidos en Roland Garros. | YOAN VALAT - hm - EFE - EPA

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Roger Federer ha anunciado este domingo que tendrá que pasar de nuevo por el quirófano para someterse a una cirugía en la rodilla que le mantedrá «muchos meses» fuera de las pistas. El suizo ha confesado que quiere intentar volver a la competición, aunque también deja claro que es «realista» y plenamente consciente de lo difícil que es volver al máximo nivel de la ATP tras una operación a los 40 años.

«A medio y largo plazo, para sentirme mejor, necesitaré cirugía, así que decidí hacerlo. Estaré con muletas durante muchas semanas y fuera de la competición durante muchos meses. Es lo correcto porque quiero estar sano», ha informado el ex número uno del mundo a través de un vídeo en su cuenta en Instagram.

Los problemas físicos han continuado en el caso de Federer tras su paso por la temporada de hierba. El genio de Basilea empezó a tener problemas en su articulación a principios de 2020 y en febrero anunció una intervención que acabaría por dejarle KO el resto de la temporada. Esta temporada reapareció en el torneo de Doha y regresó a la tierra batida con derrota a las primeras de cambio en Ginebra y viéndose obligado a retirarse de Roland Garros. Luego cedió en segunda ronda en Halle y cayó en los cuartos de final de Wimbledon en su último encuentro antes de anunciar este domingo su nueva operación.

«Soy realista, sé lo difícil que es a esta edad hacer otra cirugía e intentarlo, pero quiero estar saludable y pasaré por el proceso de rehabilitación con un objetivo mientras todavía estoy activo, lo que me ayudará», ha precisado sobre sus opciones de volver a jugar. «Quiero darme un rayo de esperanza para volver a la gira de alguna forma», ha añadido.