Rafael Nadal, Rudy Fernández, Melani Costa y Sete Benavides.

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2024 pasará a la historia como un año en el que la generación de oro del deporte mallorquín se echó a un lado para dejar tras de sí una serie de trayectorias irrepetibles. El anuncio de la retirada de Rafael Nadal es el último de una serie de despedidas por parte de una serie de figura que han marcado un punto de inflexión a lo largo de los últimos tres lustros. Su esperado adiós es la guinda a unos meses en los que otros miembros de este grupo de elegidos han tomado esa dura decisión, cada uno de sus respectivos ámbitos, pero siendo referencias dentro del deporte mallorquín, pero también español y mundial.

Sin duda, al margen de la marcha de Nadal, el otro gran exponente que ha dicho adiós en este 2024 es el baloncestista Rudy Fernández. Con 39 años y en sus sextos Juegos Olímpicos -París-, después de ganar tres medallas, además de dos títulos mundiales y cuatro europeos, sin dejar de lado sus éxitos con el Real Madrid y el Joventut, además de ser el primer balear en jugar en la NBA (2008-2012), el alero formado en Sant Josep Obrer decidió poner fin a más de dos décadas en la élite y en el evento que acabó por consagrarle.

Poco antes anunció también el final de su carrera deportiva la nadadora Melani Costa. Campeona del mundo y tres veces olímpica, la deportista de Calvià decidió despedirse en casa, con 35 años y en el Campeonato de España disputado en Son Hugo, donde recibió el cariño de su gente y de todos los que fueron compañeros y rivales de la mejor nadadora balear de todos los tiempos.

También en el año en curso, el primer piragüista olímpico de las islas decidió pasar a una nueva etapa de su vida. Sete Benavides, multimedallista mundial y europeo y bronce en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, además de diploma cuatro años después en Río, se iba entre lágrimas, siendo el primer gran exponente de este deporte a escala internacional en Baleares.

En un segundo plano, otros como el triatleta y triple campeón del mundo Mario Mola siguen en activo, aunque lejos de su radio de acción como han sido las Series Mundiales, marcando el punto y final (o seguido) a unos años de gran calado e irrepetibles dentro de la historia del deporte balear.