¿Cuántas veces hemos escuchado que un helado es 100% artesanal? Se trata de un dato que, de tanto oírlo, acaba pasándonos desapercibido. Y es que entre colorantes, conservantes y demás, lo que certificaban 100% puro acaba siendo poco más que un sucedáneo. Hay excepciones, como Rivareno Gelato.
Esta heladería artesanal ofrece, a día de hoy, el mejor helado avalado por diferentes premios y reconocimientos. Rivareno también presume de porcentaje pero, en su caso, cuando afirman que su helado es 100% artesanal se trata de un dato rigurosamente cierto. Los más escépticos pueden echar un vistazo a su laboratorio de fabricación, una dependencia anexa a la tienda, donde los artesanos operan a la vista del cliente dando forma a las más exquisitas elaboraciones.
Y lo hacen a diario, porque además de apostar por una línea maestra 100% artesanal, Rivareno Gelato basa su actividad en una premisa irrenunciable: la fabricación de helado a diario, desechando el excedente de la jornada anterior. De modo que el cliente únicamente se lleva al paladar productos frescos. Sin grasas hidrogenadas, ni colorantes artificiales, ni conservantes. Solo productos de primera, como la mejor leche de Italia, procedente de los pastos alpinos. Además, utilizan agua embotellada de manantial para la elaboración de sus sorbetes, polos y granizados. Y llenan sus cestas de fruta troceada con productos locales de primera calidad, que reciben a diario.
Rivareno Gelato ha desembarcado en Palma de la mano de Riccardo Falcone, un joven emprendedor italiano que cuenta con heladerías de reconocido prestigio en Milán, Brescia, Roma y Florencia, entre otras ciudades. Tras veinte años frecuentando la Isla, Falcone decidió expandir su negocio a Palma con la intención de «ofrecer el mejor helado». Su compromiso con la calidad es incuestionable: «No vamos a escatimar dinero que comprometa la calidad del helado». Y precisamente, una de las medidas que adoptan para preservar sus productos consiste en mantener el helado tapado, para protegerlo del aire y el proceso de oxidación que altera su sabor y textura.