— ¿Cómo colabora el Instut de Formació i Ocupació en el proyecto Connect’Up?
— El año que viene queremos reeditar Innova, el concurso de ideas empresariales que se hizo aquí durante años. Creemos que la mejor manera de trabajar es a través de la colaboración público-privada. La cooperación con Connect’Up era lógica. Participamos en dos premios: ofrecemos un portátil al premio Emprendedor Joven y, por otro lado, uno de los ganadores tendrá una estancia gratuita de un año en el coworking de Calvià. Además, vamos a participar en los Connect’Up Days, donde informaremos a los emprendedores y asistentes de nuestras iniciativas.
— ¿Qué papel juega el IFOC en la emprendeduría?
— Trabajamos el empleo, la formación y el emprendimiento e intentamos que estas tres patas estén lo más relacionadas posible. En la mayoría de nuestros proyectos siempre hay una promoción del emprendimiento. Cuando ofrecemos orientación a los jóvenes, les animamos a que se lo planteen como una alternativa útil a su vida laboral.
— ¿A lo largo de estos años han observado en el IFOC un alza del interés por emprender?
— Hay una tendencia muy sostenible en el autoempleo. Crece el número de emprendedores, aumenta el número de proyectos y hay una heterogeneidad de perfiles. En estos momentos hay una transformación. En la crisis había emprendedores por obligación, que carecían de espíritu emprendedor, no tenían conocimientos o habilidades. En estos momentos, por suerte, las tasas de empleo se han recuperado y el emprendedor ahora es más vocacional, está más preparado y suele venir con una idea de negocio muy relacionada con lo tecnológico.
— ¿Qué perfil tiene el usuario del coworking del IFOC?
— Estamos en proceso de renovación, pero tenemos desde asesores de dietas a agencias de viajes, asesorías fiscales o de empresas, diseñadores, expertos en marketing, periodistas... Lo bueno es que entre ellos se generan sinergias y ese es, en definitiva, el espíritu del coworking.
— ¿Qué es la Lanzadora de Empleo?
— Es una iniciativa promovida por la Fundación Santa María La Real y hay más de cien lanzaderas en toda España. Calvià es el tercer municipio del país con el mayor número de ellas. Durante cinco meses, personas de diferentes perfiles se unen para buscar empleo con la ayuda de un coach. Calvià es pionera, junto con Valladolid, en crear una plataforma lanzadera con financiación 100 por cien municipal e intergeneracional. Empezamos hace tres años y el índice de inserción a día de hoy es del 80 por ciento.
— Por otro lado, cuentan con una aceleradora de empresas.
— Un coach ayuda a veinte participantes durante dos meses compaginando actividades grupales e individuales. Al final de todo el proceso, surgen proyectos y nosotros invitamos a un grupo de expertos tanto de iniciativa pública como privada para que puedan testar sus ideas de empresa. El año pasado lanzamos la primera y ahora en septiembre desarrollaremos una segunda edición.
— ¿Calvià posee el microclima ideal para emprender?
— Creo que sí. Calvià es un municipio de servicios, pero donde no solamente hay turismo sino que también comercio. Hay unas posibilidades de negocio muy importantes en todo lo que es oferta turística a todos los niveles, tanto en naútica, como de naturaleza en el turimso cultural. Y eso, obviamente, genera oportunidades de negocio.