Aunque el día principal es el domingo, ya desde el jueves 27 habrá actos programados, como la Ballada Popular de Tardor del viernes 28, a las 20.30 en el CEIP Climent Serra I Servera o la Mostra Eqüestre el sábado en la Plaça de n’Amengual. «La Fira, se ha convertido en un referente de la vida social, comercial, cultural y económico de nuestro pueblo» asegura Mora. «Es por ello que desde el Ajuntament apostamos decididamente por consolidarla como un inmejorable escaparate de nuestro pueblo y su comercio de proximidad y de gran calidad, así como un eje de dinamización en general de todo el tejido empresarial», añade.
El domingo, día de la Fira, se podrán ver herramientas antiguas de tracción animal, muestras de productos locales, de caballos, motos y coches antiguos, demostraciones de forja, combat de glosat y exhibiciones de todo tipo. «Es tan importante ser fieles a la tradición como mirar el futuro» sostiene la alcaldesa, que ve en la Fira una gran oportunidad para enseñar como «el comercio y las empresas locales están innovando y adaptándose a las necesidades de los clientes para afrontar los nuevos retos que presenta la sociedad».
La regidora por su parte no quiere dejar pasar la oportunidad de «agradecer a todos los que hacen posible la Fira, por el extraordinario trabajo garantizando sus servicios a pesar de las enormes dificultades que se están sufriendo». «Somos un pueblo con un fuerte sentido de pertenencia y un talante sociable, amante de las cosas buenas de la vida» concluye Xisca Mora, «así que animamos a participar y a dejarse seducir por la oferta comercial y que esto sirva también para defender un modelo económico y social más justo».