Archivo - Vista del río Onyar con la Catedral y la Iglesia de Sant Feliu, a 30 de diciembre de 2021, en Girona (España). La ciudad de Gerona es la capital de la provincia del mismo, pertenece a la Comunidad autónoma de Cataluña, está situada entre la cor | Glòria Sánchez - Europa Press - Archivo

TW
0

Entre enero y septiembre se registraron 100.031 compraventas de viviendas en Catalunya, el máximo histórico desde 2007, cuando pinchó la burbuja inmobiliaria, aunque se sitúa a las puertas de un «ciclo bajista», según ha explicado el ceo de Gamerin, Luis Fabra.

Lo ha dicho este jueves en la presentación del 'Informe Trimestral del Mercado Inmobiliario en Catalunya en el tercer trimestre de 2022', en la que también han participado la directora general de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (Anai) y de la Associació d'Agents Immobiliaris de Catalunya (AIC), Anna Puigdevall; el presidente de ambas entidades, Vicenç Hernández, y el presidente del Consejo General de los COAPI de España y presidente del COAPI de Barcelona, Gerard Duelo.

Fabra ha apuntado que los datos agregados de los nueve primeros meses y los del tercer trimestre reflejan un «efecto de anticipación» ante las previsiones de subidas de tipo de interés y por el empuje de la demanda extranjera, que ha alcanzado una sexta parte del total.

Ha asegurado que el sector inmobiliario encara «un cambio de ciclo» tras un periodo que ha definido como extraordinario y con circunstancias atípicas, como el aumento de la percepción de necesidad de cambio de vivienda y del ahorro existente tras el confinamiento.

Por ello, ha augurado que en los próximos meses las variaciones intertrimestrales de compraventas serán cercanas a cero y que las interanuales se irán moderando.

Por otro lado, ha señalado que la oferta de viviendas en alquiler se ha reducido a causa de la incertidumbre normativa que tiene este mercado y a pesar del aumento de las rentabilidades, lo que ha provocado un incremento de los precios.

Sensaciones

En una intervención a través de vídeo, Duelo ha asegurado que los datos actuales «todavía no reflejan la mala situación» que ha señalado que vendrá.

Hernández, por su parte, ha augurado una caída de precios de entorno al 5% y de las operaciones del 10%, aunque ha señalado que es «bueno, ya que oxigena el mercado e impide que haya una burbuja inmobiliaria».

Puigdevall ha subrayado la sensación de incertidumbre y ha señalado que la reducción en el número de las operaciones significaría «volver a la normalidad» tras el incremento de los últimos trimestres.